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“Nadie quiere ser detenida en la calle y también queremos que la Policía disminuya la violencia hacia nosotras”, aseveró Ruth, una de las 40 transexuales que ayer por la noche se manifestaron enfrente de la Central de Policía. Hoy, a las 19.30, el grupo presentará un petitorio al jefe de Policía, Marcelo Lami, al que adjuntarán las denuncias que el grupo realizó por malos tratos o abuso de autoridad hacia ellas en la vía pública.
Anoche, tres representantes del grupo fueron recibidas por el subjefe de Policía, Regino Montero, a quien le plantearon sus inquietudes por la violencia que se ejerce en los procedimientos de detención hacia quienes ejercen la prostitución.
“Nosotras queremos que termine la violencia y que se establezca una zona roja para poder trabajar”, sostuvo Ruth.
Las mujeres destacaron la necesidad de delimitar una zona roja porque “también necesitamos el respaldo de la Policía por la droga, los robos y la trata de personas, algo común en ese tipo de lugares”.