inicia sesión o regístrate.
Un encuentro muy particular entre el presidente norteamericano Barak Obama y jóvenes empresarios tuvo lugar ayer, en el que la presencia argentina no pasó desapercibida y la camiseta de Boca Juniors tampoco.
La escena ocurrió por la mañana, en la ciudad de Washington, durante una reunión entre Obama y representantes de pequeñas empresas de la capital norteamericana, como la cadena de alimentos orgánicos Yes, la agencia de contrataciones Francis Lee Contracting y el local de sándwiches Taylor Gourmet.
Justamente, uno de los dueños de esta cadena de comida -cuya clientela está mayoritamente compuesta por jóvenes asesores políticos y “hipsters”- David Mazza, lució la remera del conjunto xeneize para su encuentro con el mandatario norteamericano.
Obama, quien se encuentra en plena campaña electoral de cara a los comicios de noviembre próximo, felicitó según consigna la agencia AFP a los empresarios por sus exitosos emprendimientos, y explicó los alcances de una nueva legislación que impulsará el Gobierno.
Cumbre del G-8
La cumbre del G-8 dará la oportunidad a Barack Obama de insistir, a seis meses de la elección presidencial, sobre sus prioridades económicas y de política exterior, mientras la crisis de la deuda europea amenaza la reactivación económica.
En el ambiente campestre de la residencia presidencial de Camp David (Maryland, este), 100 km al noroeste de Washington, Obama acogerá mañana y el sábado a los flamantes mandatarios de los ocho países más industrializados del mundo, como el primer ministro japonés Yoshihiko Noda, el jefe del Gobierno italiano Mario Monti y el presidente francés François Hollande.
Al igual que Monti, Hollande desea orientar la política económica de su país hacia un mayor crecimiento, contrariamente a lo promovido por la canciller alemana Angela Merkel.