inicia sesión o regístrate.
Una cadena de supermercados fue condenada a indemnizar con más de 60 mil pesos a un trabajador que denunció haber sido despedido por ser portador del virus del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA), informaron fuentes judiciales.
La Sala sexta de la Cámara Laboral confirmó un fallo de primera instancia y condenó a la cadena de supermercados Coto “ante la ausencia de prueba que demuestre que el accionar de la empleadora se debió a una causa distinta a la mencionada”.
En consecuencia “no queda más que tener por cierto que el despido obedeció al estado de salud” del empleado, dijeron los camaristas Graciela Craig y Carlos Fernández Madrid, quienes concluyeron que se trató de un “despido discriminatorio”. Los magistrados explicaron que cuando un dependiente “se considera injustamente discriminado, debe invertirse la carga de la prueba, debido a las exigencias de la tutela de los derechos fundamentales del trabajador y por las serias dificultades probatorias del hecho discriminatorio o lesivo del derecho fundamental”.
Según el fallo, Coto conocía que el trabajador “era portador de HIV al momento del despido”, ya que en dos oportunidades había sido internado por esa afección y la cesantía se produjo diez días después de la segunda hospitalización, ocurrida en el sanatorio San José, de esta Capital, entre 2007 y 2008.
Los jueces desestimaron el argumento de la empresa que sostenía que “el actor fue despedido porque hubo una reestructuración”.
Sostuvieron que “en un período de cinco meses se ausentó e internó por diversos malestares, circunstancia que, unida a la contemporaneidad que existe entre el momento en que es despedido resulta conducente a la presunción de discriminación”.
Tratamiento asegurado
El coordinador regional de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) sobre temas de VIH, Massimo Ghidinelli, declaró ayer en Managua que Latinoamérica asegura el tratamiento médico a 600.000 personas portadoras del virus, lo que calificó como “un buen logro”.
Ghidinelli consideró “un buen logró” que 600.000 personas reciban tratamientos para el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), que afecta a 1,5 millones de personas en Latinoamérica, pero dijo que en la región aún “hay mucho por hacer”.
El representante de la OPS participa en Managua en la VI reunión de la Red de lazos sur-sur, integrada por Bolivia, Brasil, Cabo Verde, Nicaragua, Paraguay, Santo Tomé y Príncipe, Guinea Bissau y Timor Oriental.