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El sistema educativo de hoy parece que está preparado para un sálvese quien pueda, ya que la mayoría de las instituciones educativas adolecen de matafuegos, botiquín y camillas de primeros auxilios. También de calefacción, planes de emergencia para evacuación en casos de desastre, edificios adecuados, etc. Esto debería estar, ya que está establecido claramente en la ley de higiene y seguridad, y, sin embargo, se pregona que todo está bien y que cada día estamos mejor.
Sugiero que de una vez por toda las autoridades educativas se preocupen por dar cumplimiento a esta ley mediante la capacitación permanente de los trabajadores educativos en la prevención de las enfermedades profesionales y los accidentes de trabajo tan frecuentes actualmente. De esa manera, se dará lugar a una extraordinaria frase que dice “se predica con el ejemplo” y que no sigamos pensando que la educación pasa por un sálvese quien pueda.
Dr. Héctor Hugo Montero
Ciudad