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Mientras que los “dragones” siguen elevando la temperatura social de Chubut, el gobernador Martín Buzzi no quiso quedarse de brazos cruzados. Ayer, mientras los trabajadores de la construcción ligado al yacimientos petrolífero Cerro Dragón y conocidos como “dragones” incrementaban las protestas y se resistían a ser desalojados, el primer mandatario provincial ordenó la “conciliación obligatoria” para abrir el diálogo, y aseguró que no iba a permitir que se reprima a los obreros. Anoche se conoció que los gremialistas no acatarán esa medida y seguirán con los piquetes.
Cabe destacar que ayer mismo la Justicia federal de Comodoro Rivadavia había dispuesto el desalojo de los trabajadores de la Uocra, quienes bloqueaban el ingreso a todos los yacimientos de Chubut, lo que provocó cerca del mediodía un pico de tensión.
Lo cierto era que, desafiante, uno de los voceros de los “dragones”, Gustavo Montiel, había asegurado que no se moverán de los cortes de ruta hasta tanto sean respondidos sus reclamos salariales.
“Ya estamos jugados y si perdemos esto, perdemos todo. Acá vamos a estar parados nosotros y nos va a tener que ir bajando la Policía”, sostuvo Montiel a la prensa.
Pero del otro lado, el jefe de la Unidad Regional de Comodoro Rivadavia, comisario Luis Butazzi, había asegurado un inicio del diálogo con los “dragones” y estimaba que las rutas estarían liberadas anoche, algo que no sucedió.
De todos modos, unos 120 efectivos se hallaban ayer apostados en el más importante de los piquetes, en la intersección de las rutas 3 y 26, donde estaba concentrado medio millar de personas, entre las que había una gran cantidad de mujeres y niños, esposas e hijos de los trabajadores.
Por su parte, y sin ánimo de enfriar la situación, el senador radical Mario Cimadevilla advirtió a un programa radial que al gobernador Buzzi “se le ha ido de las manos” el conflicto.
“Los "dragones' son como barrabravas. Se ha desmadrado el conflicto, se les ha ido de las manos. Hay una ineptitud muy grande de parte del Gobierno provincial para el manejo de este conflicto”, advirtió.
Cimadevilla resaltó que “los trabajadores en conflicto son un sector disidente de la Uocra que fue alimentado por la empresa y por el gobierno de Das Neves”.
“Se lo fogoneó políticamente y se lo bancó económicamente. El gobernador Das Neves tiene un enfrentamiento muy grande durante su gestión con la conducción oficial de la Uocra, que responde a Gerardo Martínez”, concluyó.
La realidad es que ayer, a la mañana, unos 3.000 trabajadores petroleros se concentraron sobre la ruta 3, a bordo de los ómnibus y camionetas que los trasladan habitualmente a los yacimientos, a la espera de poder acceder a sus puestos de trabajo. Pero, luego de varias horas de espera, decidieron retirarse y regresar hoy.