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Los festejos del 9 de Julio no encontraron a todo el país con los mejores ánimos. Otra provincia, además de Buenos Aires, dejó en claro que los números no dan para otorgar aumentos salariales. En este caso, se trata de Santa Cruz, la cuna kirchnerista por excelencia. Ayer, el gobernador de esa provincia, Daniel Peralta, reiteró que “es imposible” cumplir con el pedido de aumento salarial planteado por los policías que desde hace una semana cumplen medidas de fuerza.
Sin embargo, aseguró que por decreto se le otorgaría un aumento salarial a los policías de la provincia. Fuertes rumores hablaban de que el incremento sería del 35%. Pero el costo de vida en una de las provincias más australes del país ya se habría comido este incremento.
Por otro lado, los policías lograron unificar un petitorio con sus reclamos y en el aspecto salarial exigieron que el denominado “valor punto”, que establece la escala salarial de la fuerza, pase de $15,6, que se paga actualmente, $29 pesos, lo que implicaría que el haber mínimo pase de casi 5.000 a 8.700 pesos.
“Nos encontramos con un petitorio que para nosotros es imposible de cumplir en las condiciones actuales, porque llevar el valor punto, como se denomina, a 29 pesos implica un aumento del orden del 85,9%”, explicó Peralta.
De todas formas, el mandatario ratificó que su gobierno está “haciendo lo posible para no cerrar los canales de diálogo” con los policías en conflicto, aunque admitió que “la falta de servicio repercutió en varios sectores” de la sociedad.
Un importante número de policías provinciales de todas las comisarías estaba cumpliendo desde el lunes pasado con guardias mínimas, sin armas ni uniformes, lo que estaba afectando la seguridad en todas las ciudades.
“Si bien pueden haber sido muchos los motivos, no esperamos nunca esta situación”, admitió el gobernador Peralta, tras lo cual aseguró que “nunca” va a “enfrentar” a los policías “ni desde lo político ni desde lo institucional”.