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El Gobierno presentó hoy una protesta oficial ante el Reino Unido para repudiar la profanación del monumento a la memoria de los soldados argentinos caídos en el conflicto de 1982 en Islas Malvinas.
A través de una nota enviada por la Cancillería argentina se exigió a la gestión británica el ‘inmediato‘ esclarecimiento de ese hecho, informó en un comunicado.
Por su parte, las autoridades de las Islas Malvinas condenaron ayer la profanación de la ermita de la Virgen de Luján en el cementerio de Darwin y calificaron al hecho como ‘un acto de vandalismo‘.
En el escrito enviado hoy a Gran Bretaña, la Argentina expresó que ‘está firmemente convencida de que a través del diálogo y el respeto a las disposiciones de las Naciones Unidas se evitan y neutralizan los actos de vandalismo como los que hoy deploramos‘.
Instó al Reino Unido a ‘responder con el diálogo frente a la intolerancia y la violencia de unos pocos y, atendiendo el deseo de la comunidad internacional, a retomar las negociaciones para poner fin a la disputa de soberanía imperante en el Atlántico Sur‘.
La Cancillería recordó el mandato de las Naciones Unidas que insta a las dos partes a ‘reanudar‘ las negociaciones a fin de encontrar una ‘solución pacífica‘ a la disputa y reafirmó sus derechos de soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur.