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Una multitud calculada en millares de personas salió ayer a las calles de la mayor ciudad de Pakistán para protestar contra la película antimusulmana realizada en Estados Unidos, lo cual insinúa que la indignación contra el filme en el mundo islámico está lejos de terminar.
El funcionario policial Nasir Lodhi calculó en 5.000 a los participantes en la manifestación en Karachi. La seguridad fue reforzada y varias zonas de la ciudad fueron cerradas para controlar el movimiento de los inconformes. Los manifestantes quemaron banderas de Estados Unidos y exigieron castigo para los productores de la película. En general, la marcha fue pacífica. El filme La inocencia de los musulmanes presenta al profeta Mahoma como un embustero, mujeriego y pederasta. Los musulmanes se sintieron muy ofendidos, y decenas de personas han muerto en las protestas.