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La euforia y las estelas de las victorias en los clásicos (a Central Norte por Copa Argentina y a Gimnasia y Tiro en el actual certamen) ya se apagaron en Lerma y San Luis. El presente inmediato tiene a Juventud Antoniana enfocado en dos objetivos supremos: torcer de una vez por todas la seguidilla negativa de visitante que hace más de un año no le permite festejar fuera de los límites del Portezuelo (la última vez fue en octubre del año pasado frente a Central Córdoba, en Santiago del Este ro).
Pero, a su vez, una hipotética victoria del santo esta noche, cuando visite a Gimnasia y Esgrima de Concepción del Uruguay, a las 20.30, en Entre Ríos, le permitiría por añadidura disponer de una chance inmejorable de meterse en la zona de clasificación, privilegio perdido hace varias semanas, cuando el conjunto antoniano hacía gala de su irregularidad y las dudas ensombrecieron por momentos el panorama en la Lerma, en un torneo inestable, cambiante y sin equivalencias supremas que se impongan sobre el resto.
Y si de irregularidades se trata, el hoy entonado santo se topará esta noche en el Litoral argentino con uno de los planteles más irregulares del torneo: el lobo entrerriano, que se preparó para ascender de la mano de su DT Hilario Bravi, pero que viene padeciendo alarmantes déficits defensivos, especialmente, en sus dos últimos compromisos con los otros equipos salteños, Gimnasia y Tiro y Central Norte (recibió seis goles en ambos encuentros).
Juventud pisará el complicado escenario del “Manuel y Ramón Núñez” con la mente puesta en volver a meterse en zona de clasificación y así ser el único equipo salteño con chances realistas de pelear por el objetivo grande, aquel sitial que hoy sólo está en manos de santafesinos, entrerrianos, misioneros y tucumanos.
El santo deberá ganar esta noche y aguardar por una derrota de San Martín, su rival directo en la puja, en el duelo de tucumanos frente a San Jorge, para encaramarse antes de fin de año en el fluctuante lote parcial de los cuatro clasificados.
Pese a que la intención es no alterar las fórmulas que traen consigo eventuales éxitos, tres cambios sufrirá la alineación antoniana en relación con el clásico triunfal con el albo: Gustavo Ortiz volverá al titular tras purgar una sanción y relevará a su amigo, el lesionado Oscar Domínguez, en el círculo central, donde también Matías Fernández, una de las figuras del último duelo salteño, le cederá su puesto a Luciano Córdoba por acumulación de amarillas; mientras que Marcos Litre relevará al malogrado Hugo Prieto en el ataque.
MARCOS LITRE “Nunca dejamos de confiar”
Volvés a la titularidad después de mucho tiempo.
Sí, en lo personal estoy muy contento por eso. Siempre estuve peleándola, ahora me tocó esta oportunidad y voy a aprovecharla al máximo.
¿Cuán complicado es el partido de esta noche en Entre Ríos.
Será duro, pero nosotros vamos a buscar los tres puntos, esperemos que las cosas nos salgan como nos vienen saliendo. El equipo está confiado y creo que nos va a ir bien.
Enfrentan a un equipo con muchas falencias defensivas, pero que también puede meter cuatro goles en su cancha, como contra Gimnasia. ¿Con qué se van a encontrar?
Tuvimos la posibilidad de hacerles cuatro goles, pero ellos son un equipo de hacer muchos goles también. Tenemos que tomar precauciones. Haciendo nuestro juego los vamos a complicar.
¿Fue la mejor semana de Juventud en la temporada?
En dos semanas tuvimos tres victorias. Eso nos dio tranquilidad, pero no nos tenemos que relajar. Un triunfo será importante para seguir apuntando al primer objetivo, la clasificación. No miramos lo que hacen los demás, queremos ganar en cualquier cancha. Nunca dejamos de confiar en nosotros. Muchas veces las cosas no nos salían, pero el grupo siempre salió adelante.