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A nadie le gusta ser espiado, mucho menos cuando esta tarea la realiza un grupo de inteligencia del Gobierno. Es posible que el denominado Proyecto X a cargo de Gendarmería Nacional exista, incluso con otra denominación, desde hace mucho más tiempo del que se sospecha. Sin embargo, al haber quedado al descubierto hace que varios miembros de la oposición le reclaman al Gobierno nacional respuestas concretas: ¿qué era el Proyecto X?, ¿a quién espiaba? y, los más importante, ¿por qué y para qué?
Varias organizaciones políticas y sociales compararon este tipo de espionaje con las “prácticas” que se realizaban durante “la última dictadura militar”.
El gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta, quien está enfrentado con el kirchnerismo, sostuvo que no creía que la Gendarmería haya actuado sin órdenes para recopilar datos y que el caso “no deja de sorprender”.
El presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Luis Miguel Etchevere, calificó de “altísima gravedad institucional” las tareas de espionaje que hizo la Gendarmería a diversas entidades y dirigentes del campo, por lo cual exigió un “rápido esclarecimiento” del caso.
En tanto, el jefe del bloque de diputados radicales, Ricardo Gil Lavedra, denunció que el Gobierno “mintió” al negar la existencia del Proyecto X y lo relacionó con las “peores prácticas de la dictadura militar”.
“No creo que Gendarmería haya actuado porque se le ocurrió a alguien”, dijo Peralta y remarcó que el caso “no deja de sorprenderme, porque en realidad no es así como se construye más y mejor democracia, que debe hacerse en función del diálogo aún en el disenso”.
Para el radical Gil Lavedra, esta situación debe generar “dos pasos: dar las aclaraciones del caso y asumir la responsabilidad política que viene de esto, más allá de las responsabilidades penales concretas”.
El diputado explicó que “desde Gendarmería realizaban actividades prohibidas por la ley, porque efectuaba control de inteligencia sobre agrupaciones sociales, dirigentes y trabajadores”, entre otros.
Explicaciones
El ministro de Defensa, Arturo Puricelli, de quien no depende la Gendarmería ya que es una fuerza de seguridad, había asegurado la última semana que “en absoluto” hubo espionaje por parte de Gendarmería y, en esa línea, el senador oficialista Aníbal Fernández opinó que “es muy tarada la conclusión a la que nos quieren llevar”.
A su turno, Etchevere criticó que el Gobierno no haya dado una respuesta concreta ante las denuncias de tareas de inteligencia en el denominado Proyecto X, al remarcar que esa postura “es gravísima, porque en otros países hasta han renunciado presidentes por casos de espionaje”.
Etchevere remarcó que es “inadmisible que después de haber recuperado la democracia, el Estado dedique sus recursos y fuerzas de seguridad espiar a los ciudadanos”.
Denuncias de abogados e informes periodísticos indicaron que una serie de documentos obtenidos luego de un allanamiento en Campo de Mayo, en el Centro de Reunión de Información de la Gendarmería, habrían confirmado que Gendarmería espió a dirigentes sociales y políticos.
Los asambleístas, preocupados
El abogado de la Asamblea Ciudadana Ambiental Gualeguaychú, Osvaldo Fernández, anticipó ayer que pedirán formalmente informes a Gendarmería Nacional sobre el aparente seguimiento de la fuerza de seguridad a asambleístas durante los cortes de ruta realizados en el marco de la lucha contra la pastera Botnia-UPM.
Fernández precisó que “lo primero que haremos es pedir informes a la representación de Gendarmería Gualeguaychú”, y consideró “bochornoso el espionaje que se realizaba sobre los asambleístas, no solo en los cortes sino también en otras acciones”.
El letrado anticipó que “en caso de no obtener respuestas, presentaremos recursos de hábeas data para conocer sobre el espionaje realizado”.
Fernández aclaró que ya existió un pedido al Escuadrón 56 de Gendarmería Gualeguaychú, donde informaron que las actuaciones habían sido remitidas a la Justicia federal.
El asambleísta Martín Alazard, por su parte, dijo que “en las movilizaciones de la asamblea era habitual que Gendarmería tomara fotos y filmaciones de los participantes”.
“En reiteradas oportunidades lo denunciamos. Hicimos -a través de nuestros abogados- los reclamos pidiendo informes y nos dijeron que no, que no existía ningún tipo de antecedente de los asambleístas”, añadió.