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Tal como era de esperar, la jefa de Estado realizó una encendida defensa del proyecto que trajo fuerte críticas de sectores opositores. “Es tan necesaria una reforma en la Justicia para que garantice los derechos de todos”, advirtió la Presidenta ante el aplauso de cientos de funcionarios. En este sentido ahondó sobre el tema y sostuvo que “no solo de los que tienen capacidad de lobby”, dijo en una clara defensa del proyecto oficialista enviado esta semana al Congreso.
“Para los invisibles y los pobres no hay cautelares ni inconstitucionalidades”, advirtió la mandataria al referirse al nuevo régimen de personal doméstico, que reemplazó un decreto ley de 1956 que discriminaba a las empleadas domésticas con respecto al resto de los trabajadores.
En ese contexto, se quejó porque “en 60 años no hubo una sola medida cautelar ni un solo juez que declarara la inconstitucionalidad de ese decreto” y, por ello, remarcó que “es tan necesaria una reforma en la Justicia para que garantice los derechos de todos”, indicó durante el acto en la Casa Rosada.
Anuncio presidencial
La Presidenta encabezó ayer el acto de promulgación de las leyes de régimen de contrato de trabajo para el personal de casas particulares y la que castiga a quienes promueven el trabajo de menores de edad.
El acto se desarrolló en el Salón de las Mujeres del Bicentenario en Casa de Gobierno. La Presidenta mantuvo videoconferencias con La Rioja y con la localidad bonaerense de San Andrés de Giles. Al hablar en Casa de Gobierno, la mandataria destacó las “tareas activas de seguimiento a través de Trabajo” en la baja de los índices de trabajo infantil, aunque aseguró que “fundamentalmente lo que potenció esa baja fue la aplicación de la asignación universal por hijo”.
A juicio de la Presidenta, la asignación fue “la gran herramienta que permitió que los padres, para poder cobrarla, tuvieran que mandar a los chicos al colegio, lo que significó hasta un crecimiento en la matrícula”.
Dilma con Cristina
En medio de la creciente preocupación por la relación comercial, la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, se reunirá el próximo 25 de abril en Buenos Aires con Cristina Kirchner, un encuentro que estaba pautado para comienzos de marzo pero que había sido postergado por la muerte de Hugo Chávez. Fuentes de la Presidencia brasileña confirmaron que las jefas de Estado discutirán asuntos relativos con la relación bilateral, que atraviesa por algunas turbulencias en lo que se refiere al comercio y otros temas vinculados con el Mercosur y la Unasur.