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16 de Agosto,  Salta, Centro, Argentina
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Dejó todo en el olvido

Domingo, 21 de abril de 2013 23:32
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Una actuación para el olvido dejó Juventud Antoniana en el empate frente a Racing de Olavarría, 0 a 0, en el Padre Martearena. El santo no jugó bien frente a un rival limitado y que llegó para cumplir con este compromiso, buscando mantener su arco sin que le conviertan goles, tal como sucedió ayer.

El partido se presentaba ideal para que los dirigidos por el “Tahuichi” Sergio Albornoz pudieran levantar cabeza en lo que va de su participación en el endecagonal. Pero no hubo caso. Y el resultado final fue el fiel reflejo de una floja producción, que para cambiar este presente necesita mostrar otro perfil de equipo y con más hambre de gloria.

Juventud dio la impresión de que estaba dispuesto a ponerse el overol y marcar supremacía durante los primeros minutos de juego. En ese lapso volcó todo el trabajo en campo contrario, haciendo circular la pelota con acierto. Tanto Enrique Triverio como Hugo Prieto se movieron por todo el frente de ataque y, con pases precisos del Beto Claudio Acosta, anduvieron muy cerca del arco defendido por Martín Mocoroa.

Pero sólo fue un espejismo. Y la visita también avisó cuando José Loncón, en diagonal y pisando el área grande, sorprendió con un remate que Angel Pedroso respondió en forma. Otra vez atacó Racing, por intermedio de Francisco Vazzoler, con un tiro de media distancia.

Al transcurrir la media hora de juego la impaciencia por el lado antoniano empezó a tomar cuerpo, porque ya no se atacaba con la insistencia de los primeros minutos y el juego ingresó en el terreno de las imprecisiones.

En el complemento, se agudizo el mal juego de Juventud. Con un Beto Acosta disminuido físicamente, faltó alguien que ejerciera el control de la pelota con la suficiente claridad y que generara espacios para penetrar la cerrada defensa que plantó el conjunto visitante.

Leo Silveira, sin la vocación de un hombre creativo, intentó ponerse el equipo al hombro, pero falló. Incluso hasta el mismo Gabriel Zuvinikar quiso agarrar la lanza para ir al frente, pero chocó también con el trabajo de contención que armó Racing de Olavarría, dispuesto a defender la igualdad a capa y espada.

Así fue cerrando Juventud esta presentación de local, tratando de avanzar hasta Mocoroa, pero sin ideas y hasta displicente. Y cuando al fútbol se juega de esta manera y el rival toma el tiempo, es muy complicado hacer goles. Entonces, el camino se hace empinado para salir a flo te.

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