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Las pymes buscan financiarse a mayor plazo en la Bolsa a través de cheques. De esta manera creció la negociación de cheques de pagos diferidos (CPD) que vencen entre 181 y 360 días.
La extensión de los plazos de negociación creó la necesidad imperiosa de recordar una materia pendiente con las pymes: el pagaré bursátil.
En la Bolsa la financiación a través de cheques crece sostenidamente desde su lanzamiento a fines del 2003. Se llegan a negociar $15 millones o aún $20 millones en una sola jornada. Sin embargo, se empiezan a notar dos nuevas tendencias que hacen aún más interesante la negociación de este instrumento. Los bancos no toman cheques a más de 120 días (y ya este plazo no es muy frecuente); mientras que la Bolsa acepta cheques con el plazo máximo ofrecido por la ley de cheques, que es hasta 360 días. Así, la primera tendencia es el incremento de la negociación de los CPD en Bolsa a plazos mayores de 180 días; mientras que históricamente, el grueso de lo negociado en CPD estaba concentrado entre los plazos comprendidos entre 60 y 120 días.