"La Constitución dice que la esclavitud no existe, pero a veces parece que eso no se respetara", dice Dora Maldonado. La mujer trabajó como empleada doméstica casi 50 años y sigue "haciendo changas" para mantenerse en una provincia que todavía tiene en negro al 89,4 por ciento del personal de casas particulares. Pese a que hubo avances, Salta está entre las ocho jurisdicciones más atrasadas en la materia.
Dora Maldonado, que fue secretaria general del Sindicato de Empleadas Domésticas, cree que los controles son insuficientes. "Hay que supervisar que las empresas que ofrecen servicios de personal eventual hagan los aportes que corresponden", sostuvo.
Salta es la octava provincia con más trabajo doméstico irregular después de Misiones, Corrientes, Santiago del Estero, Chaco, Jujuy, Formosa y Santa Cruz, de acuerdo con datos de la Encuesta Anual de Hogares Urbanos realizada en 2013 por el INDEC.
Hoy se conmemora el día para reivindicar los derechos de los trabajadores que se dedican a la limpieza y el cuidado del hogar, que siguen siendo mayoritariamente mujeres. Si bien se reconocen mejoras, diferentes sectores consideran que faltan políticas para regularizar la situación.
"Es la rama de actividad más precarizada de todas", señaló Jorge Paz, economista y titular del Instituto de Estudios Laborales y del Desarrollo Económico (IELDE) de la UNSa.
El especialista sostuvo que, para revertir las estadísticas negativas, hace falta generar fuentes más sólidas de empleo y no basta con sancionar a los infractores. "Es un error pensar que este problema se puede combatir solo con controles y multas. Eso tiene un efecto indudable, pero no lo es todo. El tema central es la escasez de acumulación de capital en sectores dinámicos que generen puestos laborales de calidad adecuada y que proporcionen a las personas alternativas laborales a estos puestos simples, de baja productividad y salario", explicó.
¿A que atribuye que en Salta c...
La realidad económica actual hace que miles de salteñas que cumplen horarios rígidos, se encargan de tareas pesadas y trabajan cuando otros descansan, no accedan a beneficios básicos como una obra social. La proporción de trabajadoras no registradas en esta rama duplica la cantidad de empleo informal que existe en otros sectores.
Dora Maldonado limpió casas desde entre de los 13 a los 60 años y recién ahora pudo anotarse para terminar la secundaria. Pese a que logró jubilarse, tiene que seguir haciendo trabajos eventuales para cubrir sus gastos.
"Es importante estudiar porque uno aprende a redactar, pero es algo que siempre fui postergando. Hay que seguir haciendo muchas cosas por los derechos de este sector", opinó Dora.
La contribución patronal para regularizar a un empleado es de 35 pesos mensuales y la escala salarial vigente es de 25 pesos por hora.
"Hubo avances en los últimos años. Los esfuerzos del Ministerio de Trabajo e la Nación fueron muy importantes. Y de hecho, lograron disminuir la tasa de informalidad a nivel nacional. Pero claramente todavía persisten los núcleos duros de precariedad", analizó Jorge Paz.
"No hay excusas para no blanquear"
Walter Neil Bühler, abogado laboralista, opinó que "no hay excusas para no pagar la contribución patronal para tener a un empleado doméstico registrado porque es una carga muy baja que le permite al trabajador acceder a beneficios como la obra social o la jubilación".
El monto mensual que se debe tributar para "blanquear" al personal doméstico no supera los 35 pesos mensuales.
El experto también indicó que los contribuyentes que pagan el impuesto a las ganancias pueden deducir los aportes del servicio doméstico.
"El índice de empleo no registrado en esta actividad es el más elevado. El trámite para regularizar la situación es muy sencillo. Se puede hacer por internet", indicó.
Bühler remarcó que la ley sobre el trabajo en casas particulares que se aprobó en marzo de 2013 "fue un avance importante después de décadas de postergación".
El profesional consideró que la norma implicó cambios importantes como el reconocimiento de las licencias por maternidad o la equiparación de las indemnizaciones, que antes eran inferiores en el rubro del servicio doméstico que en cualquier otra rama.
Bühler también se refirió a la metodología que se aplica para establecer la escala de sueldos. "El Consejo Nacional de Trabajo en Casas Particulares debería fijar el salario, pero en la práctica, esto se determina en el Ministerio de Trabajo de la Nación. Lo deseable sería que los montos surgieran de una negociación entre los diferentes sectores involucrados", manifestó el abogado.