La familia Torres convive desde hace un mes con un poste de la empresa Telecom, apoyado sobre su pared exterior. Una situación similar ocurre con otro poste que se encuentra sostenido por los cables de teléfono y de luz.
El pasado 21 de noviembre, dos postes de la empresa Telecom que se encontraban en mal estado, no resistieron los fuertes vientos que afectaron la ciudad y se quebraron en forma completa en su base, cayendo uno de ellos pesadamente sobre la pared de la vivienda de la familia Torres, mientras que un segundo poste, ubicado a 50 metros del primero, quedó totalmente inclinado, sostenido por los cables que estaban enganchados en su parte superior.
"Estaba con mi familia realizando trabajos de albañilería justamente en esa pared. Yo me encontraba revocando el interior cuando sentimos un fuerte golpe y la pared tembló, nos sorprendimos y asustamos. Cuando salimos afuera pudimos ver que un poste de madera había caído sobre la pared. Este poste es viejo y estaba en mal estado, al caer arrastró a otro que está un poco más adelante", comentó Omar Torres.
La denuncia de lo ocurrido se realizó en forma inmediata, pero la solución aún no llega. "Vinieron a ver pero solo pusieron unas cintas rojas y se fueron, hasta ahora no han hecho nada para retirar los postes", dijo.
Uno de ellos quedó ocupando parte de la calle que es muy transitada, "de día o de noche cualquiera se lo podría llevar por delante, necesitamos que en forma urgente lo saquen de mi propiedad y veamos por los daños, que parecieran no ser muchos, pero no hay voluntad de hacerlo", expresó.
Telecom no cuenta con una oficina en Güemes y es la empresa que más accidentes de postes caídos ha sufrido. En todos los casos, demostró no importarle demasiado esta situación. Ya hubo casos de calles cortadas semanas por postes caídos. "Nadie los quiere tocar para no tener problemas", concluyó Torres.