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Ni la lluvia ni tampoco la demora en el procesamiento de los datos empañó un resultado que echó por tierra con todos los pronósticos. Ayer el tablero electoral empezó a depurarse con vistas a los comicios generales de octubre. Ganó Daniel Scioli (Frente para la Victoria), tal como se esperaba aunque no lo hizo con la diferencia que se preveía. Mauricio Macri, Lilita Carrió y el radical Ernesto Sanz fueron los primeros en festejar; más cautelosos Scioli y su gente -a la espera de los cómputos de la provincia de Buenos Aires- aguardaron hasta último momento para aparecer. Ese contraste se veía en las pantallas de los diferentes canales, acaparado por las figuras de los integrantes del Frente Cambiemos, festejando bajo el lema: "Unidos somos más". Después apareció en escena Sergio Massa, junto a su compañero de fórmula, el salteño Gustavo Sáenz. Allí convocó a todos los candidatos que participarán en octubre a trabajar en propuestas concretas. Al cierre de esta edición, la fórmula Scioli-Zannini se convirtió en la más votada en todo el país a partir de su triunfo en la provincia de Buenos Aires, que complementó imponiéndose en todo el norte y el sur del país, al igual que en el Litoral, en tanto que Cambiemos, el frente que lidera Mauricio Macri, se mostró competitivo en la zona centro del país.
En la provincia de Buenos Aires, la más fuerte en cantidad de votantes del padrón electoral nacional, con un escrutinio muy lento y para el cargo de gobernador, el Frente Para la Victoria (computándose los votos de Aníbal Fernández y Julián Domínguez, muy parejo entre ambos) se imponía con el 38% sobre María Eugenia Vidal de Cambiemos que arañaba los 32%, en una muy buena elección; en tanto que Felipe Solá (Frente Renovador) conseguía el 19%.
En el interior
En el interior del país los resultados no fueron sorprendentes, especialmente en aquellos distritos con predominio del oficialismo.
En el caso de Santiago del Estero, el oficialismo se imponía en forma aplastante y con más del 70 por ciento de los votos, mientras la alianza UNA quedaba relegada a un lejano segundo puesto.
En Salta, con más del 50% de los votos, ganaba la fórmula Scioli-Zannini con el 42% de los votos, en tanto que Massa-Sáenz (sumando los votos de José de la Sota) alcanzaba el 28,3% relegando a Macri-Michetti al tercer lugar al obtener el 23% de los votos. La sorpresa se dio en capital con la victoria de Sergio Massa sobre el resto, que en el análisis final mostró un interesante caudal de electores en todo el país.
El gobernador bonaerense fue la opción más votada en su provincia, en San Juan, La Rioja, Catamarca, Tucumán, Jujuy, Salta, Chaco, Formosa, Santiago del Estero, Misiones, Corrientes y Entre Ríos; así como en Tierra del Fuego, Santa Cruz, Chubut, Río Negro y Neuquén.
Finalizaron las PASO y ahora la mirada apunta a octubre, aunque quedaron en evidencia dos extremos: la aparición de Máximo Kirchner en Santa Cruz y la vigencia de Adolfo Rodríguez Saá con su excelente performance en San Luis.
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