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El preso fugado causó tensión en Güemes

Sabado, 19 de marzo de 2016 01:30
Rubén Castillo
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Con los cinco días de infructuosa búsqueda de Adrián Garone, un expolicía criminal que se fugó del Complejo Penitenciario III de General Gemes, la incertidumbre en esa localidad había ya comenzado a disminuir antes de que lo atraparan. En el poblado se rumoreaba que el peligroso delincuente podría estar lejos de la ciudad a pesar de que lo encontraron en la rotonda de Torzalito.
Se trata de situaciones aisladas para alivio de la comunidad. En su momento, la apertura de la cárcel fue el centro del rechazo de un importante número de familias gemenses, que le dijeron que no al proyecto de instalación de la unidad en el municipio.
La población siempre tuvo una manera de reaccionar frente a una alarma de fuga de la cárcel y es demostrando un cierto temor hacia los prófugos, buscando información sobre ellos, como por ejemplo el grado de peligrosidad.
El 27 de febrero, un jubilado fue asesinado en el basural municipal, la presencia de efectivos policiales en una zona cercana a la cárcel federal, hizo suponer en la comunidad gemense que se trataba de una fuga de presos. Supuesto que fue reforzado por una irresponsable información viralizada en la red social Facebook, que hacía referencia a la fuga de siete peligrosos internos federales. Se genero una psicosis a gran escala, algunos negocios cerraron, familias se encerraron en sus domicilios y las redes sociales explotaron.
Algo similar ocurrió con Garone pero en una dimensión menor a pesar de que se trató de un hecho real. "El servicio penitenciario debe brindar información en forma inmediata, para evitar falsas hipótesis y que la gente reaccione con miedo", manifestó José González, propietario de un comercio de la zona centro, vulnerable con este tipo de situaciones.
Por otro lado, Rubén Castillo, empleado como sereno de una empresa local, también expuso su molestia con el personal directivo de la cárcel. "Las fugas pueden ocurrir y considero que deben ser informadas inmediatamente, mi trabajo es tranquilo pero con mucho riesgo que se incrementa si personas que purgan penas en la cárcel se escapan y buscan un lugar como refugio. Además, generan un gran temer en la comunidad", dijo.
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