Imponente marcha para pedir justicia por Rocío Alancay

Una imponente marcha que reunió 6.000 vecinos se realizó anoche en General Güemes. La misma se desplazó por las principales calles céntricas de la ciudad pidiendo Justicia por Rocío Alancay, una joven que fue violada y semienterrada por sus violadores hace 7 años atrás. Dos de ellos cobraron notoriedad al ser considerados víctimas de una tortura por parte de policías güemenses.

"Fue hace 7 años, Rocío tenía 9, le pedí que fuera a realizar una compra en un negocio cercano, allí una prima suya, que algo debe estar involucrada en el hecho, le ofreció un paquete de galleta y la alejó hasta unos eucaliptos donde aparecieron desde atrás estos delincuentes, entonces menores de 14 y 16 años, le pusieron un trapo con droga en el rostro y la hicieron desvanecer. Mi hija fue llevada hasta un domicilio del Bº El Cruce donde fue violada, le destruyeron todo el aparato reproductivo, me duele recordar lo que me explicaron los médicos que le hicieron a ella", Mi hija fue llevada hasta un domicilio del Bº El Cruce donde fue violada, le destruyeron todo el aparato reproductivo, me duele recordar lo que me explicaron los médicos que le hicieron a ella", recordó con voz entrecortada y sollozos Rosa Flores.

Después todo es un poco confuso, porque Rocío fue semienterrada en un descampado cercano a terrenos del ingenio San Isidro: "Creyeron que había muerto, hicieron un pozo poco profundo, allí la enterraron, la taparon con tierra y barro, por suerte personas que pasaron por el lugar la rescataron, ella está vida, pero a qué costo, ahora vive en un infierno".

Rosa realizó todas las denuncias correspondientes, los menores fueron detenidos y quedó demostrada su participación en la violación, pero por ser menores salieron en libertad. "Clamé por justicia pero nadie me escuchó, ni el gobierno provincial ni el municipal, yo imploraba por mi hija mientras ella era sometida a tres delicadas operaciones, para ella no hubo derechos humanos ni subsidios ni nada, solo dolor" "Clamé por justicia pero nadie me escuchó, ni el gobierno provincial ni el municipal, yo imploraba por mi hija mientras ella era sometida a tres delicadas operaciones, para ella no hubo derechos humanos ni subsidios ni nada, solo dolor".

Rosa revivió su calvario con el juicio a los policías. "Asistí a todas las sesiones, parecía que estaban defendiendo a indefensos niños a quienes le colocaron una bolsa en la cabeza, y a mi niña qué, ella no sufrió una tortura. Todo empeoró cuando comenzó a crecer, porque tomó conciencia de lo que le pasó. Ella me dice: Mamá yo no sirvo para nada, para que voy a vivir. Eso me desgarra el corazón, no tiene amigas, no quiere salir, está con psicólogos, se quiso suicidar en dos oportunidades Eso me desgarra el corazón, no tiene amigas, no quiere salir, está con psicólogos, se quiso suicidar en dos oportunidades, pero no solo ella, su hermano mayor también sufre una gran culpa, porque él debía acompañarla esa tarde a realizar la compra, también piensa en la muerte porque no soporta verla así a su hermana, destrozaron toda mi familia, pero yo voy a luchar hasta que mis fuerzas me acompañen", expresó Rosa Flores.

La comunidad güemense siempre estuvo al lado de Rosa, las primeras marchas tuvieron lugar cuando fueron reconocidos Rodríguez y Palacios en el video de las torturas, pero no tuvieron la repercusión esperada. En la tarde de hoy, más de 6.000 vecinos se presentaron para manifestar su indignación con el gobierno provincial y Derechos Humanos. "Es un deber de ciudadano estar cerca de Rocío, lo que hicieron con ella fue una gran injusticia, vamos a hacer todo lo posible para que el caso de reabra y ellos puedan tener un mínimo de tranquilidad", expresó la intendenta Alejandra Fernández durante la marcha.