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La vieja Facultad de Naturales

Lunes, 24 de diciembre de 2018 00:00
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La vieja Facultad de Ciencias Naturales de Salta fue la piedra basal de la actual Universidad Nacional de Salta.

La historia comienza hacia 1950 con la creación por parte del profesor Amadeo R. Sirolli (1900-1981) de la Escuela Superior de Ciencias Naturales, la que tuvo un origen humilde con un grupo docente fuertemente vocacional y ad-honorem. Un par de años después de su fundación se convertiría en Facultad de Ciencias Naturales de Salta dependiente de la Universidad Nacional de Tucumán ("Pedes In Terra Ad Sidera Visus").

El décimo aniversario de la Facultad de Ciencias Naturales de Salta coincidió aproximadamente con el 50 aniversario de la de Tucumán (UNT).

Nuestros años 60

La idea de esta nota es ilustrar, basados en documentos de la época, cuál era la actividad académica en boga a mediados de la década de 1960.

Entre las autoridades de la Facultad se contaba como decano al ingeniero químico Carlos S. Martearena, secundado por el vicedecano Ing. Roberto C. Rodríguez y, como secretario, el contador nacional Eduardo M. Chambeaud. El Honorable Consejo Directivo tenía como representantes de los profesores: Ing. Carlos Alberto Sastre, Ing. Manuel Sánchez, Dr. Branimiro Males, Dr. Jorge A. Charlone, Ing. Roberto G. Ovejero y el Ing. Laureano Hoyos. Como representantes de los egresados (graduados) se encontraban los licenciados Herminia Olga Reynoso, Gladys E. Herrera y Naddau A. Yudi. Como representantes de los estudiantes se hallaban los señores Jorge Oscar Perosa, Antonio Normando Arias, Juan Carlos Quiroga, Antonio E. Manrique, Gonzalo Porcel y José Antonio Salfity.

Para entonces la facultad se dividía en cuatro departamentos, un museo y una escuela técnica. Salvo la Escuela Técnica de Campamento Vespucio, que estaba dedicada a la enseñanza de la industria petrolera, todas las demás tenían su sede en el Palacio Zorrilla de Buenos Aires 177 y en el Museo de Ciencias Naturales, Mendoza N§ 2, del Parque San Martín.

Los cuatro departamentos mencionados eran los de: Biología, Geología, Física y Matemáticas y, Química e Industrias. El plantel docente constaba de cinco profesores titulares, un profesor interino, tres docentes libres y un importante grupo de profesores contratados.

Los cinco profesores titulares eran los ingenieros Carlos S. Martearena, a cargo de la cátedra de Arquitectura Industrial, Carlos A. Sastre, en Análisis Matemático I y Geometría I, Roberto C. Rodríguez, en Topografía y Cartografía, Manuel Sánchez, en Geología y Producción de Hidrocarburos y el Dr. Branimiro Males en Antropología.

En el plantel de profesores contratados figuraban algunos de los que más tarde van a ser grandes maestros de la Universidad Nacional de Salta. El plantel de profesores contaba con el Ing. Juan Russo (Física I), Ing. Roberto G. Ovejero (Física II, III y Geometría II), Ing. Pérez Felipoff (Petroquímica I y Química Analítica), Ing. Humberto S. Rico (Petroquímica II), Ing. Jorge Agustín Charlone (Termodinámica), Ing. Luis Oscar Bustos (Química General), Prof. María S. Rodríguez de Sastre (Química Inorgánica), Dr. Carlos A. Cadena (Química Orgánica), Ing. Laureano Hoyos (Electrotecnia, Máquinas Térmicas), Ing. Beni de Frans Bloser (Economía, Legislación y Seguridad Industrial), Ing. José Ricardo Tolaba (Dibujo Técnico, Estabilidad y Resistencia de Materiales), Ing. Carlos Morales (Automatización y Control de Procesos), Dr. Carlos H. Moreno Espelta (Geología I), Dr. Marcelo Figueroa Caprini (Geología II), Dr. Juan Miguel López Escribano (Mineralogía), Dr. Eduardo Francisco Briatura (Petrografía I y II), Dr. Saturnino J. Iglesias (Paleontología I), Ing. Raúl Ricardo Berlingieri (Geología Económica I), Dr. Domingo Jakúlica (Geología Económica II), Dr. Antonio P. Igarzábal (Geografía Física), Ing. Ennio P. Pontussi (Edafología), Lic. Bernardino M.M. Galliano (Climatología, Zoogeografía), Prof. Adela R. Oviedo de De La Vega (Zoología de Invertebrados, Anatomía y Fisiología en Zoología), Dr. José Ruiz (Química Biológica), Dr. Dardo Escalante (Histología y Embriología en Zoología), Bioq. Miguel Ignacio Riba (Microbiología), Prof. Carmen Visuara de Alemán (Microbiología), Dr. Dercio Piergentili (Botánica de Vasculares y Celulares), Ing. Víctor E. Lérida (Mecanismos), Ing. Remigio D. Gabín (Disciplinas, Operaciones y Procesos) y el Ing. Rolando F. Poppi (Operaciones Unitarias II).

Científicos de lujo

También estaba contratado en el Museo de Ciencias Naturales, en carácter de Investigador de Arqueología y Antropología, el profesor Antonio Serrano quien se convertiría en una figura nacional de su campo. Entre sus obras se destaca "Líneas fundamentales de la arqueología salteña" (1963). Serrano estaba asistido por el profesor Osvaldo Maidana quien lo acompañaba en las exploraciones arqueológicas por el noroeste argentino. Como profesor interino a cargo de la enseñanza de inglés se encontraba el Prof. Miguel Kortsarz. Como docentes libres fungían los ingenieros Héctor Lucio González (Petroquímica), Emilio R. Uribarri (Química de Petróleo y Gas) y Elmo J. Alquatti (Elaboración de Hidrocarburos). Entre los investigadores adscriptos, además de los mencionados, se encontraban los ornitólogos Gunnar A. Hoy y Francisco Contino, así como el paleontólogo Rodolfo Parodi Bustos y el geólogo Félix Venancio Lorenzo. Estos dos últimos se hallaban estudiando entonces el yacimiento fosilífero de Cabeza de Buey donde se descubrió un esqueleto bastante completo de mastodonte.

Los primeros doctores

Es importante destacar que a diez años de iniciados los estudios universitarios en la Facultad de Ciencias Naturales de Salta ya habían egresado varios geólogos y que tres de ellos defendieron sus tesis en 1963 para optar al título de Doctor en Ciencias Geológicas. El Lic. Apolo Ortiz realizó un trabajo titulado “Estudio Geológico de las Sierras de Castillejo y Sancha, Salta”, bajo la dirección del Dr. Oscar Ruiz Huidobro de la Universidad de Buenos Aires. El jurado estuvo integrado por los doctores Celestino Danielli, Casimiro Gutierrez, Enrique César Rayces, Saturnino J. Iglesias y Marcelo Figueroa Caprini. La tesis fue calificada como sobresaliente con recomendación de publicación. El Dr. Apolo Ortiz fue así el primer geólogo doctorado de Salta cuando la facultad dependía de Tucumán. También inició su tesis doctoral el Lic. Federico Guillermo Mädel, con la dirección del Dr. Domingo Jakúlica, titulada “Relevamiento Geológico sobre la margen derecha del Río Juramento, Salta”. Estos estudios fueron previos a la construcción del embalse de Cabra Corral. Otro de los egresados, el Lic. Andrés Nicolás Lencinas, defendió su tesis doctoral en la Universidad Nacional de Córdoba titulada “Estudio Geológico del Flanco Occidental de la Sierra Chica y del fondo del Valle de Punilla, Córdoba” y contó con la dirección del catedrático Dr. Telasco García Castellanos. La importancia alcanzada por el cuerpo de profesores y alumnos hizo que Salta fuera elegida en 1963 como sede para que se llevaran a cabo las “Segundas Jornadas Geológicas Argentinas” que tuvieron un gran éxito por la afluencia de científicos nacionales y extranjeros así como por la calidad de los trabajos presentados que fueron publicados en varios volúmenes. Otro punto a destacar es la calidad de los conferencistas que visitaban entonces a la vieja Facultad. Entre ellos puede mencionarse al Ing. José Babini (1897-1984), uno de los grandes historiadores de la ciencia, catedrático de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires. Babini se convirtió en una autoridad mundial en la historia de la ciencia y sobre ese tema disertó en Salta en enero de 1963. Otra autoridad científica que visitó y disertó en Salta en la década de 1960 fue el sabio japonés Dr. Kitaro Hayase, profesor de la Universidad de Tokio. Su tema estuvo relacionado con la importancia de los minerales industriales. Para entonces Hayase residía en Salta ya que había sido contratado como consultor internacional por la Dirección General de Fabricaciones Militares que se encontraba explotando el yacimiento de azufre de “La Casualidad” en los altos volcanes cordilleranos del límite con Chile. Diez años después de los acontecimientos aquí narrados, a partir de esa piedra fundamental, nacería en 1973 la Universidad Nacional de Salta con su acreditado logo: “Mi sabiduría viene de esta tierra”.

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