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Durante un juicio abreviado llevado a cabo en el marco del Plan Piloto de Oralidad, una mujer de 32 años resultó condenada a ocho años de prisión efectiva por el delito de comercialización de estupefacientes.
La audiencia fue presidida por el juez Martín Pérez. La pena impuesta fue de cuatro años de prisión, monto que se unificó con una condena previa en ocho años de prisión efectiva.
Según consta en la causa, durante la investigación penal preparatoria se realizaron tareas de vigilancia en relación a la imputada y a un hombre vinculado a la causa. Ambos fueron registrados realizando intercambio de sustancias prohibidas por dinero, en diferentes fechas entre agosto y septiembre de 2024.
Siguiendo con las acciones en el marco de la Investigación Penal Preparatoria (IPP), un agente revelador efectuó una compra controlada de estupefacientes y, a partir de esa constatación se ordenó el allanamiento en dos domicilios del barrio Asentamiento Los Paraísos. Clave para terminar de confirmarla hipótesis.
Durante los procedimientos se secuestró marihuana y cocaína (pasta base) fraccionadas, elementos de corte y fraccionamiento, teléfonos celulares, dinero en efectivo y otros elementos de valor.
Durante el juicio abreviado, la imputada aceptó su responsabilidad en los hechos y los términos del acuerdo consensuado entre las partes.
La acusada tenía una condena anterior de cuatro años de prisión, impuesta en junio de 2024 por un hecho similar.
El juez ordenó el decomiso y destrucción de las sustancias secuestradas y la afectación del dinero incautado.