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1 de Septiembre,  Salta, Centro, Argentina
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Los peregrinos de Santa Victoria Oeste, en la quebrada de Acoyte, en las imágenes de Javier Rueda

Por la quebrada de Acoyte, los peregrinos apuran el paso para poder cumplir con los tiempos del camino al Milagro 2025.  
Lunes, 01 de septiembre de 2025 10:33
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A solo 9 kilómetros de Santa Victoria Oeste y muy cerca del límite con Bolivia, se encuentra Acoyte, una pequeña población del departamento Santa Victoria. Este paraje de altura, rodeado de montañas y valles, forma parte del corredor cultural y natural que caracteriza al extremo noroeste de la provincia.
Su cercanía con la frontera le otorga una identidad particular, marcada por el intercambio cultural y por las costumbres que comparten con las comunidades vecinas.

Se encuentra a 9 Km. de Santa Victoria Oeste contando con una rica historia. Su nombre completo es San Miguel de Acoyte.

En el año 1818 se produjo en esta zona un importante combate entre patriotas y realistas.

Es es el camino que ya recorren los peregrinos de Santa Victoria Oeste. Un sitio de historia, tradiciones y con emblema de la historia en la lucha por la Independencia. 

Aislado, pero vibrante. Así se define Santa Victoria Oeste, uno de los pueblos más apartados de Salta que, entre montañas y valles, conserva intactas sus raíces. Declarado Lugar Histórico Nacional, este rincón del norte provincial sorprende por su biodiversidad, su cultura viva y una historia marcada por la resistencia y la fusión de tradiciones.

Ubicada a 2400 metros sobre el nivel del mar, Santa Victoria Oeste se levanta en la transición entre las Yungas y la Puna. Allí, los bosques densos ceden paso a los pastizales de altura, custodiados por la Sierra de Santa Victoria y el imponente Cerro Fundición, de 5050 metros.


En sus paisajes conviven tucanes y monos en las zonas bajas, y cóndores y vicuñas en las alturas, lo que lo convierte en un verdadero refugio de biodiversidad.
El reconocimiento oficial llegó en 1975, cuando el Poder Ejecutivo Nacional declaró a Santa Victoria Oeste como Lugar Histórico Nacional por su valor cultural.

El folclore, las ferias locales y las fiestas patronales forman parte del pulso cotidiano. Cada agosto, la celebración en honor a San Roque convoca a vecinos y visitantes con procesiones, música y encuentros comunitarios.
El tejido artesanal también es emblema del lugar: ponchos, mantas y tapices nacen de técnicas ancestrales que reflejan la unión entre el pueblo y su entorno natural. Llegar a Santa Victoria Oeste no es sencillo. Los caminos sinuosos y el clima desafiante hacen que el viaje sea una verdadera travesía. Sin embargo, ese aislamiento es también el secreto que preserva la autenticidad y tranquilidad del pueblo.

Visitar Santa Victoria Oeste es adentrarse en un valle del silencio que habla a través de su gente, su historia y sus paisajes. Un lugar donde la calma se convierte en experiencia inolvidable, y donde tradición y naturaleza se funden en una misma identidad.

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