Se trata de dos jóvenes de 18 años, de nacionalidad boliviana, radicados en la provincia de San Luis, que este domingo envolvieron a su hija muerta en una sábana, tomaron un taxi y se dirigieron a una construcción donde, luego se descubrió, enterraron a su pequeña hija. Sin embargo, luego de ocultar el cuerpo, la pareja se dirigió a la comisaría y denunciaron que su hija había sido secuestrada.
Según detalló el comisario Ítalo Amaya, jefe de la Unidad Regional III de San Luis, el domingo cerca de las 21.45, una pareja de jóvenes, llegó a la comisaría para denunciar que cerca de las 19, mientras caminaban por el centro merlino, un auto oscuro frenó cerca de ellos y un hombre armado les exigió que le entreguen a su bebé, de tan sólo ocho meses de vida.
El comisario, aseguó que el relato del joven era confuso y que la mirada baja de la mujer hacía pensar que había algo más que estaban ocultando.
Los oficiales decidieron separar a la pareja, los ubicaron en cuartos distintos y los interrogaron. Las versiones de ambos coincidían en que la beba había muerto, pero no dejaban clara la forma: uno dijo que Mayté Avendaño Panozo, había muerto por asfixia cuando le taparon la cara con una frazada, y el otro aseguró que la pequeña se cayó y se golpeó la cabeza. Hasta ese momento ninguno había dado precisiones sobre dónde estaba el cuerpo.
Cerca de la medianoche, el joven se quebró y le contó a los policías que el cuerpo estaba enterrado en un baldío en Carpintería, en la calle Altos de Carpintería, frente a una obra en construcción en la que él trabaja. Fue así que la Policía llegó al lugar junto al doctor Jorge Omar Pintos, a cargo del juzgado multifuero de la 3ª circunscripción judicial, y encontraron los restos de la menor sepultados y envueltos en una sábana.
El cuerpo fue llevado al hospital de Concarán, donde el médico Gustavo Lafourcade le realizó la autopsia para determinar qué le provocó la muerte.
La pareja quedó detenida bajo la carátula de "Averiguación de homicidio". Pasado el mediodía, fuentes policiales dieron a conocer la identidad de los detenidos: el hombre se llama Pastor Avendaño Choquevilca y su esposa Dionicia Panozo Cejas.
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Se trata de dos jóvenes de 18 años, de nacionalidad boliviana, radicados en la provincia de San Luis, que este domingo envolvieron a su hija muerta en una sábana, tomaron un taxi y se dirigieron a una construcción donde, luego se descubrió, enterraron a su pequeña hija. Sin embargo, luego de ocultar el cuerpo, la pareja se dirigió a la comisaría y denunciaron que su hija había sido secuestrada.
Según detalló el comisario Ítalo Amaya, jefe de la Unidad Regional III de San Luis, el domingo cerca de las 21.45, una pareja de jóvenes, llegó a la comisaría para denunciar que cerca de las 19, mientras caminaban por el centro merlino, un auto oscuro frenó cerca de ellos y un hombre armado les exigió que le entreguen a su bebé, de tan sólo ocho meses de vida.
El comisario, aseguó que el relato del joven era confuso y que la mirada baja de la mujer hacía pensar que había algo más que estaban ocultando.
Los oficiales decidieron separar a la pareja, los ubicaron en cuartos distintos y los interrogaron. Las versiones de ambos coincidían en que la beba había muerto, pero no dejaban clara la forma: uno dijo que Mayté Avendaño Panozo, había muerto por asfixia cuando le taparon la cara con una frazada, y el otro aseguró que la pequeña se cayó y se golpeó la cabeza. Hasta ese momento ninguno había dado precisiones sobre dónde estaba el cuerpo.
Cerca de la medianoche, el joven se quebró y le contó a los policías que el cuerpo estaba enterrado en un baldío en Carpintería, en la calle Altos de Carpintería, frente a una obra en construcción en la que él trabaja. Fue así que la Policía llegó al lugar junto al doctor Jorge Omar Pintos, a cargo del juzgado multifuero de la 3ª circunscripción judicial, y encontraron los restos de la menor sepultados y envueltos en una sábana.
El cuerpo fue llevado al hospital de Concarán, donde el médico Gustavo Lafourcade le realizó la autopsia para determinar qué le provocó la muerte.
La pareja quedó detenida bajo la carátula de "Averiguación de homicidio". Pasado el mediodía, fuentes policiales dieron a conocer la identidad de los detenidos: el hombre se llama Pastor Avendaño Choquevilca y su esposa Dionicia Panozo Cejas.