El exgobernador de Tucumán, José Alperovich , fue uno de los pocos senadores oradores que no se excedió de los minutos que tenía para exponer la argumentación de su voto sobre el proyecto para retrotraer el precio de las tarifas de los servicios públicos a diciembre del año pasado.
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El exgobernador de Tucumán, José Alperovich , fue uno de los pocos senadores oradores que no se excedió de los minutos que tenía para exponer la argumentación de su voto sobre el proyecto para retrotraer el precio de las tarifas de los servicios públicos a diciembre del año pasado.
Fueron tan solo 4.34 minutos los que utilizó el exmandatario justicialista para explicar que apoyaría la iniciativa aprobada por la oposición en Diputados. "Yo goberné Tucumán doce años: la recibí muy mal, pero los años que goberné tuve superávit y nunca se lo hice pagar a la gente humilde", comparó Alperovich.
Luego agregó: "Si fuimos al FMI es porque el país no está bien, no aguantó una corrida, y creo que el Presidente debe convocar a todos los sectores".
Sin embargo, cerca del final de la breve alocución llegó el furcio del exgobernador, que dijo: "Nadie quiere que le vaya bien al Presidente".
Horas más tarde, el parlamentario dio una entrevista televisiva y aclaró: "Quiero disculparme con el señor Presidente; tuve un furcio en mi alocución".
En diálogo con el periodista Jonatan Viale en CNN, el exgobernador de Tucumán explicó: "Lo que quise decir es que nadie quiere que le vaya mal al Presidente". "Yo soy un hombre de bien, y quiero que a él le vaya bien porque al país le va a ir bien", agregó.