Desde hace un par de años varios informes periodísticos publicados por El Tribuno advirtieron de la peligrosidad del pronunciado hundimiento de la cinta asfáltica, que se observa sobre la Av. Hipólito Yrigoyen, intersección con el pasaje San Lorenzo, tramo urbano de la ruta nacional 68 que atraviesa el pueblo de La Merced.
En ese preciso lugar, un bloque de hormigón que cubre un canal y que corta perpendicularmente el camino nacional corre peligro de colapsar. La advertencia surgió oportunamente de los propios vecinos que, aseguran, observan cómo paulatinamente el problema se va agudizando.
Sobre este punto, el intendente Juan Angel Pérez explicó: “Ya le enviamos a Vialidad el pedido de los vecinos y fotografías de los accidentes que ya hubo a causa del badén. Vinieron del organismo nacional a hacer las inspecciones en 2016 y 2017, pero mientras los legisladores nacionales no incluyan las obras en el presupuesto desde Vialidad tampoco pueden hacer nada”.
El jefe comunal aclaró: “Al tratarse de una ruta nacional y el municipio no tiene jurisdicción sobre ella”.
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Desde hace un par de años varios informes periodísticos publicados por El Tribuno advirtieron de la peligrosidad del pronunciado hundimiento de la cinta asfáltica, que se observa sobre la Av. Hipólito Yrigoyen, intersección con el pasaje San Lorenzo, tramo urbano de la ruta nacional 68 que atraviesa el pueblo de La Merced.
En ese preciso lugar, un bloque de hormigón que cubre un canal y que corta perpendicularmente el camino nacional corre peligro de colapsar. La advertencia surgió oportunamente de los propios vecinos que, aseguran, observan cómo paulatinamente el problema se va agudizando.
Sobre este punto, el intendente Juan Angel Pérez explicó: “Ya le enviamos a Vialidad el pedido de los vecinos y fotografías de los accidentes que ya hubo a causa del badén. Vinieron del organismo nacional a hacer las inspecciones en 2016 y 2017, pero mientras los legisladores nacionales no incluyan las obras en el presupuesto desde Vialidad tampoco pueden hacer nada”.
El jefe comunal aclaró: “Al tratarse de una ruta nacional y el municipio no tiene jurisdicción sobre ella”.
Una situación que se agrava
Quienes transitan habitualmente por la zona, también pueden percibir que esta situación se va agravando. Por esa vía, que conduce a los Valle Calchaquíes, circulan miles de vehículos por día, muchos de ellos de gran porte como ómnibus y principalmente camiones de carga, como los ripieros. El peso, sin duda, hace lo suyo en el endeble sector en cuestión.
El canal de desagüe que atraviesa por debajo perpendicularmente la ruta 68 es muy antiguo y está embovedado con piedra caliza.
Más allá de los problemas y situaciones peligrosas que genera en el tránsito, sobre todo para quienes no conocen ese escollo de más de medio metro de profundidad, el temor es que un día el pavimento ceda ante el peso de algún vehículo.
A principios de esta década, Vialidad de la Nación adjudicó a la empresa Green SA la realización de obras de recuperación y repavimentación del tramo de la ruta 68, entre Río Ancho y Talapampa. En dicha oportunidad y a modo de prevención, se colocaron placas de pavimento rígido sobre el canal de
desagüe que se extiende en sentido oeste-este. Pasaron los años y con el peso de los vehículos, el sector fue cediendo.
A fines de diciembre de 2016, personal de Vialidad inspeccionó el lugar, según contaron las autoridades locales, y se comprometieron a ejecutar obras para solucionar el problema. A mediados del año pasado visitaron nuevamente el badén y se pintó sobre el pavimento señalización para advertir sobre la presencia del badén. A nivel comunal se realizaron todos los trámites para que se coloque cartelería y se realicen las obras. También es necesaria la colocación de reductores de velocidad, clamaron los vecinos.