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Una pareja salteña emigró a Dinamarca: "Acá valoran las ganas de trabajar"

Carlos Villarreal (33) y Sofía Herrera (19), son del sur de la provincia y el 2 de mayo pasado llegaron a la ciudad de Aalborg. Mirá su historia.
Domingo, 17 de julio de 2022 17:45

 Una pareja salteña decidió buscar su norte y en Aalborg, una ciudad de Dinamarca, encontró su destino. A 12.500 kilómetros, Carlos Villarreal (33) Sofía Herrera (19), contaron a El Tribuno que ya están instalados en una localidad junto a unos 200 mil habitantes y que en pocos días uno de ellos encontró trabajo. "La edad no es un problema, valoran las ganas de trabajar", dijeron.

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 Una pareja salteña decidió buscar su norte y en Aalborg, una ciudad de Dinamarca, encontró su destino. A 12.500 kilómetros, Carlos Villarreal (33) Sofía Herrera (19), contaron a El Tribuno que ya están instalados en una localidad junto a unos 200 mil habitantes y que en pocos días uno de ellos encontró trabajo. "La edad no es un problema, valoran las ganas de trabajar", dijeron.

"En Salta me dedicaba a trabajar en una pastelería y en una tienda de ropa familiar en Metán, de donde soy. Mi pareja es de Rosario de la Frontera y a nuestra decisión de irnos la tomamos en octubre del año pasado. El 2 de mayo pasado llegamos a Dinamarca".

"Cuando llegamos nos fuimos a Aarhus, otra ciudad de Dinamarca, pero estuvimos en un hotel a la deriva, sin saber lo que íbamos a hacer. Ahí no encontramos buenas sensaciones y en las escaleras nos decidimos por Aalborg. Estuvimos investigando en Argentina sobre estas ciudades y conocí a un chico que me había escrito así que decidimos probar suerte, estuvimos en su casa. Es un porteño que vive hace 4 años acá, llegamos y al segundo día encontré trabajo en una pizzería", dijo Carlos, quien cuenta con la ciudadanía española.

Sin embargo fue sincero y dijo que "en mi vida había hecho una pizza, ni había lavado platos. Hice la entrevista, me llamaron por teléfono para empezar ese mismo día y ni siquiera vieron mi curriculum. Se mueven mucho por las impresiones o palabras, no investigan demasiado".

Y sobre la documentación, aclaró: "Yo vine con pasaporte español. Te piden aplicar a la residencia".

El trabajo en la pizzería no duró demasiado porque rápidamente lo llamaron desde otra empresa. "Estuve trabajando una semana hasta que me escribió una persona por messenger, dueño de una fábrica. Ellos hacen parches de nicotina, una especie de caramelo. Pienso que consiguió mi contacto a través de Facebook porque tiempo atrás yo había puesto que buscaba trabajo", sostuvo.

Y agregó: "Fui a la entrevista, a las 10 AM. Me explicó las condiciones y sueldo. Me dijo que empice al día siguiente y tampoco tuve que presentar curriculum, que por costumbre nuestra, lo había llevado. En la reunión conté lo que estuve haciendo, viví 20 años en España y trabajé en la fábrica de Renault. Para él fue suficiente". 

Sobre los sueldos que ganan, sostuvo que en la pizzería ganaba 16 euros por hora y en la actual fábrica un poco más de 21, donde trabaja 37 horas semanales.

"Entre el alquiler, los servicios y la comida, nos permitimos ahorrar 1700 euros por mes", comentó Carlos, quien sostiene que cuando su pareja consiga trabajo, van a estar aún más cómodos.

"Ella tiene la residencia danesa, por ser esposa de una persona con ciudadanía europea. Le faltan algunos trámites pero posiblemente ingrese a la misma fábrica". 

"Una inversión importante"

La pareja salteña dejó en claro que si bien hay que animar a irse del país, requiere de "una inversión importante". "Fue algo que uno lo va pensando durante mucho tiempo. Abandonás todo y cuando llegas a destino te encontrás con que es bastante caro hasta que te acomodás. Abrir la cuenta danesa fue el paso más complicado pero ya estamos instalados".

El joven afirmó que con su pareja "nos propusimos no comprar vehículos ni tener grandes gastos. La idea es estar unos 5 o 7 años acá, ahorrar y viajar. Después la idea es volver para Salta u otro lugar para invertir el dinero".

Los salteños contaron que la parte emotiva es la que más se extraña. "La familia, el clima, las comidas como las empanadas y humitas se extraña muchísimo. Yo también extraño el cerro, las yungas. Acá el clima es frío todo el año, lluvioso. Los inviernos muy oscuros, seguramente pasaremos esa parte del año haciendo algún viaje".

Y finalmente alentó a las personas a buscar una mejor estabilidad. "Creo que vale la pena intentarlo dada la situación de Argentina. Cualquier cosa a la que uno se dedique, va a tener más estabilidad. La edad no es un problema, valora la actitud que uno tenga".

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