¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

22°
26 de Abril,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

VIDEO. Apple Vision Pro: ¿el jaque mate a las aspiraciones metaversales de Meta?

(*) Por Mauricio Cabrera 
Martes, 06 de junio de 2023 22:28

Ha querido el tiempo que dos de las máximas innovaciones tecnológicas se encontraran en el camino.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Ha querido el tiempo que dos de las máximas innovaciones tecnológicas se encontraran en el camino.

La inteligencia artificial que no se permitió procrastinar más su llegada a la escena mainstream.

Y la realidad extendida que encuentra en Apple al emisor definitivo del mensaje que nos señala que la hora de dar el salto ha llegado.

Percepciones son realidades.

Aunque Mark Zuckerberg pretendió anticiparse en el tiempo para que todos diéramos el salto al metaverso con él, Meta para estos efectos no es Apple.

Aún sin Steve Jobs al frente, Apple cuenta con la potestad tácita u omitida de darnos el anuncio oficial de que algo está por ocurrir.

Con el 2024 como fecha marcada para el lanzamiento de Apple Vision Pro y con el abrazo de una comunidad de adoradores que cree en todo lo que Apple hace, los Vision Pro serán los que marquen el salto de la era de los smartphones a la era de la computadora espacial.

Elegir como gran ganador a los Vision Pro de Apple cuando tendrá un costo de lanzamiento de 3 mil 499 dólares podría parecer entrañar una osadía.

Quizás incluso una irresponsabilidad.

Pero es que esa conclusión va más allá de los potenciales comparativos cualitativos que podríamos hacer entre lo primero que se ha dicho de Vision Pro y lo que ya sabemos de Meta Quest.

A Apple lejos están de preocuparle los memes sobre el sinsentido que parecería contemplar la compra de un headset con 2 horas de batería que cuesta 3 mil 499 dólares.

Hace rato ya que eso pasa con cada nueva actualización del iPhone.

Hace rato ya que eso pasa con cada nuevo producto que lanza sin que al final esos memes deriven en una negativa de la gente a comprar sus productos.

Apple está también consciente de que una vez lanzado habrá críticas de quienes dirán que el Apple Vision Pro no tendría que valer tanto cuando no es un producto terminado.

Pero ese mismo proceso se encargará de crear el hype necesario sobre los saltos en nivel de calidad que representarán futuras versiones del mismo.

Se dice desde ya que Apple no apuesta por el gaming.

Que Meta sí que ha buscado posicionarse en ese rubro que Apple continúa dejando vacante.

Que aquellas son buenas noticias para Mark Zuckerberg dado que históricamente Apple no ha dado con la tecla en ese sector.

Pero a diferencia de Apple, Meta no tiene un bastión del cual aferrarse para augurar que podría ganar la batalla.

Mark Zuckerberg tuvo el acierto de visualizar el futuro más allá de las redes sociales.

En vez de salir a hablar sobre el futuro cercano, optó por abrazar un futuro lejano para de golpe promover a Meta como la empresa que nos guiaría hacia el mañana.

Pero en ese momento, viviendo aún bajo los efectos de la pandemia, Mark no alcanzó a comprender cómo sería la humanidad postpandemia.

No alcanzó a comprender que proponerles un mundo que escapara de la realidad a quienes habían quedado aislados por el coronavirus no era una buena idea.

Hoy la sociedad tiende a recibir con rechazo las propuestas de traslado definitivo al ecosistema virtual.

Hoy la sociedad se niega a pensar que su futuro pasará por una versión caricaturizada de ella misma.

Apple se ha beneficiado de la precocidad de Meta por llegar al futuro.

Al tiempo que gozaba de tiempo en silencio para preparar su producto, aprendía de los errores clave en los mensajes de Meta.

Supo entonces darle la vuelta al mensaje de escapismo para hablar del encuentro entre el mundo físico y el mundo virtual.

Apple enfatiza en todo momento que el Apple Vision Pro va de enriquecer tu mundo real antes que de aislarte.

Rompe con lo inquietante de entregarnos al mundo virtual convirtiendo nuestro propio rostro en un avatar mucho más realista que el ofrecido por los Meta Quest.

Apple también cubre con mayor acierto el trabajo visto desde la realidad mixta.

Mientras que los Meta Quest buscaron proyectar que el futuro de las juntas de Zoom sería a través de avatares a los que muchas veces les termina faltando una parte del cuerpo, Apple ha sabido aproximarse a su base de siempre para enviar un mensaje de empoderamiento.

Apple no inventa un espacio virtual para que la gente haga su trabajo, promete entregar una extensión a sus consumidores de siempre para que ese portafolio de soluciones que tienen en el smartphone y en una tableta o en un ordenador puedan ahora tenerlo frente a sus ojos.

Aunque pudiera parecer más disruptivo el traslado a un ecosistema enteramente virtual, valerse de lo que ya está para explicar lo que vendrá reduce la fricción que tan difícil es de evitar cuando se intenta proponer un nuevo paradigma.

Es aquí donde de nuevo vuelven a converger la inteligencia artificial y la realidad extendida.

Aunque ChatGPT ha hecho más mella en Google que Meta en su batalla directa frente a Apple, podría decirse que en la batalla de la realidad extendida Meta juega de Microsoft y Apple juega de Google.

Como ocurrió en la guerra de los chatbots, Meta se ha apurado a salir a decir lo que vendría.

A diferencia de ChatGPT, las reseñas no fueron las mejores para Meta.

El resultado, en este sentido, fue contrario a lo conseguido por Open AI tanto por cuenta propia como ya integrado en productos de Microsoft.

Pero pese a esos golpes estratégicos, Google ha seguido siendo Google.

El mayor desafío para Microsoft y para Meta no pasa tanto por el producto tecnológico como por los usos y costumbres.

Google tiene una suite de servicios que están ligados al día a día de la gente.

La evolución definitiva sobre qué chatbot es mejor no pasa sólo por el chatbot en sí, sino por cómo ese chatbot y esas habilidades de la inteligencia artificial están donde el usuario se siente cómodo y donde mayor provecho puede extraer de ellas.

Ese copiar y pegar adicional que los usuarios han de realizar para llevar el resultado de ChatGPT a su correo de Gmail puede más que cualquier adorno tecnológico o funcional que se pueda tener.

Derrotar a Apple y a Google no implica sólo desarrollar mejor tecnología, implica ser capaz de modificar usos, costumbres y percepciones.

Apple Vision Pro nos ofrece tener una nueva computadora directamente en nuestros ojos.

Apple Vision Pro nos entrega la posibilidad de recibir notificaciones sin tener que sacar el smartphone de nuestro bolsillo.

Seguro que la nueva computadora un día acabará incrustada en nuestra retina.

Seguro que un día podremos sentirnos mucho más libres que portando un headset que aunque promete no aislarnos, en cierto modo sí que lo hace.

Pero lo que no va a cambiar es que las empresas que triunfen serán las que están clavadas en nuestra cabeza como soluciones para nuestra vida.

El Apple Vision Pro resulta un salto intermedio.

Es más de lo mismo.

Pero ahora con la pantalla del tamaño que queramos.

Con las manos sirviendo de controles.

Con nuestro rostro siendo escaneado para convertirse en avatar.

Y eso será suficiente para que Apple le termine ganando a Meta.

Meta, hasta ahora, no ha sido capaz de convencernos por qué dar el salto de fe a un nuevo mundo.

No es ya líder en redes sociales como para que pensemos en que ese es un argumento suficiente para irnos hacia allá.

No es líder en venta de hardware.

Más bien carece de reputación al respecto.

No es el gran referente en gaming.

No es tampoco el gran referente en materia de productividad profesional.

No es hoy, ni siquiera, una empresa valorada como innovadora.

Si tuviera que apostar, apostaría por Apple Vision Pro.

Más por lo que ya está, por los usos y costumbres, que por el producto en sí.

Y esa es la mejor noticia.

Meta tiene que construir necesidades.

Apple sólo tiene que ampliar posibilidades sobre esas necesidades que ya ha satisfecho.

(*) The Muffin

 

PUBLICIDAD