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Alejandra Bonafini, la hija de Hebe de Bonafini, aseguró que nunca ocupó un cargo en la Fundación Madres de Plaza de Mayo y que estaba “enemistada” y “enfrentada” con el apoderado y detenido Sergio Schoklender, al presentar un descargo ante la justicia que se conoció en tribunales, según confirmaron fuentes judiciales.
"Independientemente de la relación de cercanía que mantenía en su momento Sergio Schoklender con mi madre, lo cierto es que nunca tuve relación de cercanía con él y desde el año 2005 la relación era de franco enfrentamiento. Yo desconfiaba profundamente de este personaje e hice saber a mi madre y otras personas cercanas que Schoklender me producía desconfianza, que dudaba de sus manejos, que me desagradaba el trato que tenía con la gente, etc", dice el escrito presentado semanas atrás y conocido hoy
Bonafini, quien se encuentra imputada por el juez Norberto Oyarbide y debe presentarse mañana en la causa por el desvío de fondos de la Fundación, aseguró hoy en un escrito que tenía una “relación de enemistad que ha existido durante años con Sergio Schoklender” y que desconocía que se hacía dentro de la Fundación.
En la presentación, Bonafini se adelantó a negar los cargos que se le imputan y dio explicaciones sobre la venta de un departamento a su nombre a la firma sospechada Meldorek S.A, propiedad de Sergio Schoklender.
La hija de Hebe está imputada por la operación de venta a la empresa Meldorek S.A. de un departamento ubicado en la calle 44 nº 1324 de La Plata, por la suma de 25.000 dólares y según explicó, previo a la compra de ese departamento, ella era propietaria desde el año 1986 de un inmueble en la calle 67, también de La Plata, y que vendió en el 2007.
Según dijo, por esa venta cobró unos 83.000 pesos, y sumado a unos ahorros y un préstamo compró la propiedad de la calle 44 que luego vendió a Meldorek en 2010. La venta de ese inmueble a Meldorek fue luego de publicar el aviso en la inmobiliaria "Dacal", y que la empresa por medio de Patricia Alonso, secretaria de Schoklender se interesó por la misma y ofreció el dinero que ella reclamaba.
"Yo desconocía totalmente la vinculación de dicha empresa con Sergio Schoklender y con personas allegadas a él", afirmó.
Alejandra Bonafini ofreció testigos para probar que tenía una mala relación con Schoklender, entre ellos a la cantante Teresa Parodi, Directora del Espacio Cultural Nuestros Hijos que funciona en la ex ESMA.
“Debido a esta situación de enemistad personal, yo no tuve nunca ningún cargo en la Fundación Madres de Plaza de Mayo, no entraba a la sede de la Fundación, no participaba de ninguna reunión donde estuviera Sergio Schoklender e inclusive he dejado de ir a fiestas familiares y festejos porque iba este personaje", agregó.
En el escrito sostuvo que de 1985 a 1988 trabajó en la estatal ENTEL y que desde 2003 trabaja en el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.
Fuente: Infobae.com