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La convivencia entre el alemán Sebastian Vettel y el australiano Mark Webber sigue al rojo vivo y, tras la disputa que se originó en Sepang, el asesor de Red Bull anunció que se acabaron las órdenes de equipo en la escudería de las bebidas energéticas. Las órdenes de equipo son legales en la Fórmula 1 y Vettel no las obedeció en la última fecha.
Helmut Marko, asesor y consejero supremo del equipo Red Bull, anunció que “no habrá ninguna orden de equipo en Red Bull nunca más”.
La eliminación de las órdenes de equipo devuelve a Red Bull a su antigua política, que daba libertad de acción a sus dos pilotos. Esto generó disputas en el pasado, pero nunca tan abiertas y serias como en Sepang. Vettel, campeón del mundo las tres últimas temporadas, se disculpó por su acción ante todo el equipo.
Ahora la pista está libre para que cada uno de los pilotos juegue como le plazca en las carreras que faltan para completar la temporada. Se espera una dura lucha entre ambos pilotos y en China podrían seguir los chispazos que se iniciaron en Malasia. Vettel, a días de una nueva prueba, aclaró que pidió perdón por no haber obedecido las órdenes del equipo, pero no por ganar. “No me disculpé por ganar. Creo que eso (ganar) es por lo que me han contratado en primer lugar y por lo que estoy aquí. Me encanta correr y eso es lo que hice”.
Según las declaraciones de Vettel, no tenía muchas razones para ceder la victoria a su compañero Webber.
“Para ser del todo honesto, nunca recibí mucho apoyo de su parte”, señaló el alemán. “Tuve apoyo del equipo, que creo que nos apoyó a los dos de la misma forma. En cuanto a mi relación con Mark, lo respeto mucho como piloto, pero pienso que en más de una ocasión, en el pasado, en cuatro o cinco ocasiones, podría haber ayudado al equipo y no lo hizo”, agregó el tricampeon.
Hoy se pondrá en marcha la actividad en pista en China con la primera práctica desde las 23.