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Fue la novela del invierno. Una historia de desencuentros, de desengaños y que tuvo un final feliz, como siempre pasa en las novelas precisamente.
Y el protagonista central fue Leandro Zárate. La Chancha, tras su pase frustrado a Juventud Antoniana, por una propuesta económica superadora, finalmente se quedará en Gimnasia y Tiro luego de arduas y tirantes negociaciones.
Pero para que este final sea como lo esperaban en la Vicente López, los dirigentes de la subcomisión de fútbol tuvieron que trabajar a contrarreloj para conseguir los recursos y hacer frente a los números exigidos por la Chancha.
El esfuerzo se hizo porque Zárate demostró lo que vale en la cancha en el torneo pasado, erigiéndose no solo como el máximo goleador del albo sino también como uno de los puntales del equipo que dirigió Víctor Riggio. Y a propósito, el Tano también se mostró complacido por contar nuevamente con el artillero. Fue un alivio para él, y una de las condiciones para continuar siendo el DT de Gimnasia.
“Ya está, son cosas del fútbol, no hay rencores con nadie, entendemos que Zárate buscó lo mejor para él y por suerte se lo pudimos dar nosotros para que se quede. Tanto él como sus compañeros dejaron todo por Gimnasia y fueron siempre profesionales, no nos podemos enojar por lo que pasó, es entendible”, justificó Ramiro López en diálogo con El Tribuno, luego de que el delantero firmara la extensión de su contrato por un año más.
Pero para que llegara esa firma, los dirigentes de Gimnasia tuvieron que lidiar toda la tarde del viernes. Es que en el medio apareció el representante del futbolista exigiendo su parte, lo que casi voltea la negociación.
Luego de varias horas de reuniones, los integrantes de la subcomisión de fútbol fueron hasta el domicilio del delantero para cerrar esta historia.
Zárate firmó porque Gimnasia igualó el ofrecimiento que le había hecho Juventud Antoniana (por lo menos llegó hasta donde el jugador exigió), por tal motivo el precontrato que había firmado con los dirigentes del santo quedó sin efecto.
Se va cumpliendo el deseo de Riggio: mantener la base
El expreso pedido de Víctor Alfredo Riggio en Gimnasia fue mantener la base para el próximo campeonato y la subcomisión de fútbol le va cumpliendo el deseo.
Para la tranquilidad del Tano Riggio, pero también del hincha millonario, varios de los jugadores que llegaron como refuerzos para el último campeonato ya arreglaron condiciones para seguir una temporada más. Tales son los casos del delantero Iván Agudiak y el defensor-volante Diego Ianiero, quienes ya acordaron su nuevo vínculo con Gimnasia.
En tanto, los dirigentes confirmaron que los juveniles Ivo Chaves y Rubén Villarreal también se quedarán en la Vicente López, al igual que los emblemáticos Sergio Plaza y Pablo “Mecha” Rodríguez.
Por otro lado, los directivos siguen negociando para retener a Rodrigo López, Sebastián Vezzani y Franco Ascencio, quien solo debe firmar, según expresó Raúl López.
El tema refuerzos también se habló en el seno dirigencial y, según comentó el dirigente, solo incorporarían tres o cuatro jugadores.
“Es una responsabilidad muy grande manejar los números del club. Será una gran desafío que tendremos que afrontar el próximo campeonato”, sostuvo López, quien además agregó: “No se va a gastar ni un peso más, ni un peso menos. La economía la manejaremos al pie de la letra”, sintetizó.
En cuanto al presupuesto que se va a manejar, el dirigente remarcó: “Manejaremos un presupuesto un veinte por ciento superior al del campeonato pasado. Ya está todo calculado”.
Tras una semana agitada, los dirigentes del albo de a poco van enderezando el barco y con todos sus tripulantes, tal como lo pidió el técnico y lo desearon los hinchas.
Por esto se pelearon el santo y el albo
La capacidad goleadora que mostró Zárate en la temporada que se está yendo fue la razón por la que Juventud y Gimnasia se disputaron sus servicios.
La Chancha marcó catorce goles con la camiseta de Gimnasia, uno por la Copa Argentina (a Villa Cubas) y trece por el Argentino A.
Su primer tanto fue en el clásico contra Central Norte, que Gimnasia ganó 3 a 0 en la segunda fecha. Luego, marcó en Villa María para la victoria sobre Alumni por 1 a 0; después lo padecieron: San Martín en la sexta fecha, Juventud Antoniana en la octava; Guaraní en la decimoprimera; otra vez Central Norte en la decimoquinta (Gimnasia ganó 2 a 1 en el Martearena); Juventud Unida de San Luis fue su primera víctima en el endecagonal, por la tercera fecha; San Jorge recibió dos goles de Zárate en la sexta fecha y San Martín de Tucumán lo padeció en su propia cancha en la última jornada del reducido.
Después, en los play-offs, marcó el 1 a 0 en la victoria de Gimnasia sobre Rivadavia de Lincoln y cerró su cosecha en el triunfo por 3 a 1 sobre Deportivo Maipú, en el Gigante del Norte. Pero además de sus goles, Zárate siempre aportó con su físico y su presencia en la ofensiva del equipo albo.