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Las boletas de luz llegarán un poco más alta para los beneficiarios de las casas del Instituto Provincial de la Vivienda (IPV). Esto porque el Ministerio de Economía de Salta decidió que, dado el alto nivel de morosidad de los beneficiarios, ahora la cuota de la vivienda irá junto con la boleta de luz. Con ello se busca reducir la cantidad de morosos tanto en capital como en el interior de la provincia.
Según los datos que el IPV difundió, en la ciudad de Salta el nivel de morosidad llega al 46,71% del total de los adjudicatarios capitalinos. Mientras que en el interior la cifra es mayor aún: 53,28%.
Entre los argumentos que también se utilizaron para definir la nueva modalidad, se ubica el hecho de que al tratarse de un sistema solidario, donde con las cuotas de los actuales beneficiarios se construyen futuras viviendas, es necesario contar con las cuotas pagas.
Según declaraciones que realizó días atrás el ministro de Hacienda Carlos Parodi, hay beneficiarios con hasta 10 años de retraso.
En la empresa proveedora de energía eléctrica, informaron a El Tribuno que aún no saben cuando es que comenzará a regir la medida que tomó el Ejecutivo provincial.
Déficit
La cantidad de familias que solicitan viviendas al IPV es cada vez mayor. A su vez, la imposibilidad del organismo de satisfacer la demanda generó un alto déficit habitacional que hoy se presenta como uno de los principales problemas sociales de la Provincia.