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En el marco de una semana impregnada por el Mundial de Brasil no pocos espacios verdes en la ciudad de Salta y el interior fueron el blanco perfecto para soñar a ser Messi al menos por un instante. En el barrio Sarmiento la adrenalina pasó los límites de la racionalidad con más de 50 personas enfurecidas por “demoler” al otro. Como resultado del choque entre grupos antagónicos, hubo varios policías lesionados.
Nuevamente la zona oeste de esta capital fue el centro de disturbios ocasionados por hombres que se disponían a jugar un partido de fútbol. Este vez no hubo que lamentar ninguna muerte, como el año pasado con Gabriel Mura Ortiz (43). En el marco de un encuentro amateur de fútbol, los disturbios tuvieron lugar cerca de las 17.30 del sábado, en inmediaciones del frigorífico Bruneti.
Por motivos que se desconocen, pero que presumiblemente tuvieron que ver con el partido y el antagonismo de sus protagonistas, la violencia verbal y física comenzó en el medio del campo de juego, lugar que no tardo en transformarse en un enorme cuadrilátero. Piñas, patadas y elementos contundentes empezaron a volar en un choque con más de 50 personas, entre jugadores e hinchas.
Apareció la presencia policial y la bronca se trasladó hacia ellos. Fue un momento de salvajismo total donde varias personas pertenecientes a algún equipo estaba bebiendo alcohol. Como pudieron los efectivos trataron de disipar el choque pero era imposible. Trataron de identificar a las personas a través de las “armas marcadores” (efectúan disparos con bolitas de pintura para identificar a los maleantes).
Del campo de juego la tremenda gresca se trasladó a las manzanas 8 y 9 del barrio Sarmiento, donde siguieron los enfrentamientos entre grupos de personas y la Policía. Producto de esos choques cerca de cuatro policías quedaron heridos, uno de ellos perdió el conocimiento y tuvo que quedar internado. Otros sufrieron traumatismo facial, heridas cortante en el labio y fractura con desplazamiento de mano izquierda.