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Críticas y autoelogios | ¡Buen día!

Martes, 11 de agosto de 2015 21:21
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Críticas y autoelogios

'Si el techo de tu casa es de vidrio, no arrojes piedras al techo del vecino...'. Este antiguo proverbio oriental sigue teniendo vigencia más allá del tiempo y la distancia.

Agredir de algún modo a los demás y pensar que se lo merecen, es admitir —al menos en principios— que nadie tiene que agredirnos porque no lo merecemos. En realidad sí lo merecemos, más de lo que a veces estamos dispuestos a admitirlo. Es que, generalmente, quien critica se pone por encima del criticado, en una actitud de juez para lo que tal vez nadie lo ha llamado. Razón tenía Molière cuando hizo decir a uno de sus muchos personajes: 'antes de decir mal de los demás, hace falta mirarse bien a sí mismo'. O, en el decir de Carlos Johnson, 'el criticar lo ajeno, a veces se emplea para enaltecerse uno mismo'.

A próposito, me llegó un recorte proveniente de Nueva Delhi, escrito por F. C. Gera. Tiene que ver con la doble vara usada muchas veces para juzgar la misma cosa hecha por uno o por el prójimo.

'Si damos una fiesta, es porque somos buenos anfitriones, si lo hace nuestro vecino, está tirando la casa por la ventana. Si nuestro hijo se casa a escondidas, así es la jvuentud, si lo hace el del vecino, ¡qué vergüenza! Si nos postulamos para un puesto público, tratamos de servir a la comunidad, si lo hace el otro, la política es el último refugio del canalla.

Si nos dan un ascenso, era bien merecido, si ascienden a Perengano, es fruto de su constante adulación. Si nuestro hijo es estudioso, está ampliando sus horizontes, si el hijo de fulano se quema las pestañas, es un ratón de biblioteca.

Si hacemos una casa grande, es para poder recibir a nuestro gran círculo de parientes y amistades, si lo hace el otro, es una vulgar ostentación de opulencia. Si nuestra hija practica el piano, es un genio prometedor, si lo hace la del vecino, es una amenaza para la paz.

Si vamos al exterior con frecuencia, es porque viajar ensancha el entendimiento, si lo hace Zutano, quizá tenga que ver con el contrabando...'.

¿Que tal un buen examen de conciencia?

¡Hasta mañana!

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