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Palabras
¡Buen día!
"La palabra es mitad de quien la pronuncia y mitad de quien la escucha", escribió Montaigne. Es un poco decir que lenguaje es no solamente lo que uno dice, sino también lo que el otro entiende. Por eso "antes de decir algo importante, ponte en silencio a pensarlo una vez más".
Este sabio pensamiento pertenece al padre Avelino Giuliani, un franciscano de muchos años y de virtudes varias. Entresaco de sus apuntes:
"Cuando uno tiene que decir algo importante, como dar una respuesta, un consejo, una prevención, lo primero que tiene que pensar es que está por hacer algo tan delicado, como dar algo de sí, de su personalidad, de su riqueza.
No puede, por tanto, proceder con ligereza, con superficialidad, con pura buena voluntad. No cabe ninguna manera el apuro por método, por una especie de profesionalidad y, quizá, con el hábito ambicioso que lo vean a uno como hábil y expeditivo.
Piensa que es muy importante y puede ser decisivo para ambos: para quien espera y recibe tu palabra como una ayuda de vida y una guía en el camino, y para tí, que entablas o puedes entablar desde ahora una relación muy especial con la persona que se deja aconsejar y guiar por ti.
Por eso, debes pensar muy bien la respuesta que vas a dar y la sentencia que vas a proponer, para que quien la espera, no se vea defraudado y tú no vengas, al fin, a ser descalificado, como hombre superficial o consejero apresurado.
Tómate todo el tiempo que necesita un sabio para plantearse la duda y, después, para resolverla.
No hagas ni digas —al menos con tanta seguridad— lo que no hayas madurado en el "silencio pensar...".
Obviamente estas líneas están escritas para todos, pero resultan de particular importancia para quienes tienen el oficio de enseñar, aconsejar, dirigir, etc. Alguien podrá pensar que son obvias. Sin embargo, cuanto más obvias parezcan, más pronto se las olvida. Lo que trae también sus consecuencias.
Adlai Stevenson dijo que vez: "El hombre no vive sólo de palabras, a pesar de que algunas veces tienen que tratarse las propias"...
¡Hasta mañana!