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Rivalidad, amenazas y un crimen en villa Esmeralda

La violencia en el fútbol llegó al extremo entre barrios de la zona sudoeste. Incluso las peleas se extienden a adolescentes de ese sector.
Miércoles, 03 de mayo de 2017 00:00
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Una de las calles principales de villa Esmeralda estaba repleta de gente ayer por la mañana. Familiares, vecinos y amigos se acercaban a darle el último adiós a Gustavo Salomón "Chachera" Safe (36 años), el delegado del equipo Villa Esmeralda que fue brutalmente asesinado a golpes en la cabeza, en medio de una disputa, durante un partido de fútbol por el Torneo de Ruta 51 el domingo pasado, en la cancha del barrio. Hubo alcohol y violencia extrema.

En un alambrado frente a la casa del fallecido, donde se llevó a cabo el velorio, sobre la calle Clara Villarreal, sus amigos, quienes ingerían bebidas alcohólicas, colgaron dos banderas verdes y blancas.

El domingo, alrededor de las 17, faltando algunos minutos para que finalice el encuentro futbolístico, Villa Esmeralda, el equipo local aventajaba a su rival, El Aybal, por 3 a 2. En ese instante se inició una gresca donde intervinieron miembros de ambas parcialidades.

"El quiso separar, apaciguar todo, pero el equipo El Aybal se le fue encima. Lo atacaron entre varios. Ya moribundo, mal, tirado en el suelo lo seguían pateando. Lo patearon muerto. Hubo ensañamiento. Primero le pegaron con un palo en la nuca, después una pedrada en la cabeza, en la sien. Su esposa, Miriam Aranda (35), vio todo y ella quiso sacarlo mientras lo pateaban, pero la golpearon y le tiraron piedras por la cabeza. Las piedras volaban por el aire, también pedazos de vidrio. Fue horrible. Han hecho mucho daño", manifestó entre lágrimas una mujer familiar de Safe, quien no quiso brindar su identidad por temor a represalias.

Safe murió a causa de un traumatismo encéfalo craneano grave.

"Necesito que la Justicia haga algo. Que busquen todas las pruebas posibles. Él no merecía esto. No era un santo pero era un buen hombre. Siempre estaba cuando uno lo necesitaba. Era buen padre. Dejaron destrozada a una familia, a cuatro niños sin su papá", finalizó la mujer.

Rivalidad

Los vecinos de villa Esmeralda manifestaron que los enfrentamientos entre el equipo de su barrio y el de El Aybal son frecuentes.

"Yo tengo 40 años y toda la vida jugué y estas peleas en medio de los partidos existieron siempre. Empezaban con empujones, seguían con piñas y patadas pero esta vez fue de lo peor", expresó un vecino.

La rivalidad futbolística incluso se extendió a los chicos del colegio secundario de la zona. El 21 de septiembre de 2016 los estudiantes se pelearon por pintar los escudos de fútbol de cada barrio.

"Los de villa Esmeralda no se quieren con los de San Luis ni con los de El Aybal", manifestó una fuente.

Para los vecinos, el ataque del domingo fue premeditado. "Hubo mensajes de texto que ellos enviaron que expresaban odio. Vinieron a la cancha con piedras grandes, palos y vidrios. Ya planeaban hacer esto", dijo un hombre.

Ayer varios móviles patrullaban villa Esmeralda, en especial la cancha para prevenir conflictos, ya que en la red social Facebook varios jóvenes juraron vengar el homicidio. "Plomo para todos esos giles", escribió un adolescente.

"Esa tarde no había ni un policía. Recién ahora vienen los patrulleros", dijo con gran indignación una vecina.

Un detenido

Un joven de 26 años, Mario Adolfo "Cuchi" Campos, se entregó a las autoridades en las últimas horas y quedó detenido por el caso. Su imputación por homicidio era inminente. Varios testigos sindicaron como agresor al miembro de la barra de El Aybal.

 

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