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Ante la nueva búsqueda por parte de la Justicia de Ingrid Carolina Guzmán, desde Córdoba la abuela de los menores en cuestión emitió en sus redes sociales un comunicado pidiendo por el bienestar de sus nietos. "Soy abuela de S. y F., la "Yaya' para ellos, y hace un año que perdí contacto. En realidad, hace ocho años Ingrid Carolina Guzmán, usando recurso de las denuncias falsas por violencia de género, ha obstaculizado el contacto, la relación de los niños con su padre, mi hijo, y nuestra familia".
La abuela denominó a Carolina, madre de los pequeños, como una suerte de "denunciadora serial, mentirosa, despechada y vengativa". La señora resalta que a Guzmán nunca le importó el "padecimiento de las criaturas, frustradas afectivamente por un odio ajeno a sus corazones".
A través de una especie de cronología de los acontecimientos surgidos hace varios años, la abuela relata las idas y vueltas de Guzmán de una provincia a otra entre Salta y Córdoba. "Hace un año se fugó con los niños y desde entonces ha desoído sistemáticamente los llamados, notificaciones, intimaciones y dictámenes judiciales. Ha dado falsas direcciones y referencias para que no localizaran a los chicos...", señala el escrito, que finaliza con la siguiente frase: "Necesito rescatar a S. y F. de este cruel apartheid al que han sido sometidos. Ellos, los niños, lo necesitan".
Persecución
Para Ingrid Guzmán se trata de una persecución judicial que viene desde Córdoba, ciudad a la que no se presentaría por el temor a quedar detenida y sufrir el desprendimiento de sus hijos. Tras su primera detención, la mujer había señalado que se vino de Córdoba por la situación con su expareja, "se hacía insostenible debido a los acosos y a la conducta agresiva de mi ex".