inicia sesión o regístrate.
Un suboficial de la Policía de la Provincia fue imputado por amenazas, privación ilegítima de la libertad y violencia de genero en perjuicio de su expareja. Se trata de un episodio ocurrido en la ciudad de Rosario de la Frontera, donde el acusado prestaba servicio, informó el Ministerio Público Fiscal en su página web.
La mujer declaró que mantuvo una relación de dos años con el acusado y tienen una hija en común con el policía. Nunca convivieron y la víctima manifiesta que los hechos de violencia eran constantes y que, incluso, el servidor público llegó a amenazarla con su arma reglamentaria y a mantenerla encerrada en forma reiterada.
De la causa se hizo cargo el fiscal penal de Rosario de la Frontera, Oscar López Ibarra, quien luego de reunir una serie de pruebas imputó al policía Ramón Isidro Saravia por los delitos de "amenazas con armas, amenazas, privación ilegítima de la libertad y por lesiones leves doblemente agravadas por la relación de pareja preexistente entre las partes y por mediar violencia de género" en perjuicio de quien fuera su pareja.
En la denuncia, la mujer señala que el acusado se desempeña como personal policial y que mantuvieron una relación de dos años sin convivencia, producto de la cual tienen una pequeña hija.
Explicó que durante el tiempo que duró la relación, Saravia siempre se comportó de manera violenta y que en forma permanente la amenazaba con su arma reglamentaria y una picana para que no lo denunciara. Incluso llegó a privarla de la libertad y amenazar con quitarle la vida a ella y a la pequeña hija.
Según la denunciante, el último hecho ocurrió el pasado miércoles cuando Saravia se hizo presente en la casa de la mujer, la golpeó en el rostro y se llevó los estudios médicos de la niña. La víctima fue a buscarlo para exigirle que le devuelva lo que se llevó y este la empujó, provocando que cayera en la vía publica. Luego de la agresión el policía se encerró en su domicilio.
Dijo que un transeúnte auxilió a la mujer y llamó al Sistema de Emergencias 911. Horas más tarde el policía fue detenido e imputado. El fiscal pidió al juez en turno que Saravia siga preso.