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El Conservatorio Natural Loutaif, de la ciudad de Orán, es una colección viva de árboles y otras plantas leñosas que se encuentran en un mismo espacio y dispone de servicios propios de investigación, exposición y conservación.
Este contará, ahora, con especies autóctonas de los montes originarios de la provincia de Salta, es decir llanura chaqueña, zona de transición y yungas, con la aplicación de un sistema de riego alternativo.
"La valorización de las especies de árboles nativos representa una gran oportunidad para conservar y visibilizar la importante variedad de flora que tenemos en nuestra zona, acompañando las políticas del cuidado del ambiente", explicó Luis Arévalo, docente jubilado que propuso la idea al cuerpo directivo de la institución con el propósito de conservar y al mismo tiempo concientizar a la población.
Arévalo hace tiempo que trabaja en la plantación de árboles nativos en su casa. "Sin duda lo heredé de mi madre; ella siempre me señalaba los árboles y plantas y me enseñaba sus nombres. Como soy un hombre muy agarrado a las nostalgias, heredé de ella el amor por la naturaleza y así crecí. Y observando y leyendo fui aprendiendo sobre ellos".
El docente explicó que llevó esta idea a los docentes activos del Instituto Terciario e "inmediatamente empezamos a soñar. Como educadores, tenemos la posibilidad de aportar a los chicos el afecto que pueden desarrollar por las especies".
Por otro lado, la profesora Andrea Gorena, coordinadora a cargo de la Rectoría, comentó que "este proyecto nos permite crear esa conciencia y, si bien es un proyecto a largo plazo, podemos pensar en crear un aula muestrario donde las escuelas asociadas de la zona puedan venir y tener la posibilidad de conocer esto arboles nativos". "Buscamos generar un epicentro de educación ambiental que tenga contacto con la comunidad en general. Anhelamos que sea un lugar de investigación y conservación de esas especies, para que tenga impacto en las políticas de educación ambiental. Si bien no hay un número exacto, calculamos que se plantarán al menos 30 especies", detalló por su parte el profesor Miguel Ángel Linares.
Los docentes aclararon que una de las líneas de acción es trabajar constantemente con la comunidad y crear conciencia sobre el cuidado del medio ambiente. "Este es un proyecto a muy largo plazo y uno de sus objetivos es justamente disfrutar del proceso", dijeron.
La profesora María Marta Durgam, comentó que "este proyecto es muy ambicioso y contamos con la participación y colaboración del INTA, la UNSa, Guardaparques, Scouts Argentina, Fundación Proyungas y del Centro de Obrajeros. La docente confirmó que presentaron un proyecto para pedir financiación a la Embajada de Canadá y que trabajarán en un vivero escuela. "Es un legado para la comunidad", dijo.