En la zona fronteriza ubicada al norte de la provincia, sobre el límite binacional compuesto por las localidades de Salvador Mazza y Yacuiba, los equipos del refuerzo estival asistieron a 300 personas del lugar, en su mayoría pacientes pediátricos a los que se les examinó peso y talla en relación a la edad, esquemas de vacunación y sintomatología compatible con cuadros de deshidratación o alguna otra patología.
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En la zona fronteriza ubicada al norte de la provincia, sobre el límite binacional compuesto por las localidades de Salvador Mazza y Yacuiba, los equipos del refuerzo estival asistieron a 300 personas del lugar, en su mayoría pacientes pediátricos a los que se les examinó peso y talla en relación a la edad, esquemas de vacunación y sintomatología compatible con cuadros de deshidratación o alguna otra patología.
Durante el operativo -que se focalizó en las localidades de Salvador Mazza, La Pista, El Sauzal, El Chorro, El Arenal, Aguaray, Acambuco y El Chorrito- algunos niños tuvieron que ser trasladados a servicios de salud de mayor complejidad, para recibir asistencia por insuficiencias respiratorias.
Los equipos médicos también estuvieron presentes en Aguaray, Acambuco y El Chorrito. En los parajes más alejados la atención se efectuó casa por casa, con visitas domiciliarias a las familias de mayor vulnerabilidad.
La cobertura de refuerzo estival inició a principios del mes pasado y a través de esta estrategia -en menos de un mes- la Provincia lleva asistidas a más 1.500 personas que residen en zonas alejadas y de difícil acceso.
El objetivo de estas rondas es fortalecer la asistencia socio sanitaria en los departamentos San Martín, Orán y Rivadavia, y colaborar en materia de prevención de enfermedades y promoción de hábitos de vida saludables.
El foco está puesto en dos grupos, el primero integrado por niños de hasta tres años y embarazadas y el segundo, conformado por quienes están cursando la educación inicial y primaria. La base es la escuela entendiendo que es el organismo público más fuerte de la zona y que allí se aprovecha para implementar numerosas acciones con la familia.
Bajo esa premisa, equipos de profesionales, con especialistas en obstetricia, pediatría, nutrición, enfermería y atención primaria realizan controles a familias originarias y criollas; acción que se complementa con la entrega de módulos alimentarios a comunidades detectadas como de alto riesgo.
Enfermeros, agentes sanitarios y nutricionistas también trabajan en las escuelas de verano para controlar el peso y realizar otras acciones vinculadas a la seguridad alimentaria.
En todos los casos, el Ministerio de Salud provee los medicamentos e insumos necesarios para cada operativo.
A modo de sumarse a este esquema de trabajo, los Centros de Primera Infancia impulsan acciones de protección y promoción de la niñez, en parajes de Rivadavia Banda Norte, Rivadavia Banda Sur, Santa Victoria Este, Tartagal, Embarcación, Orán y Ballivián. Desde allí se acompaña a las familias con asistencia alimentaria, controles médicos y talleres de formación y concientización.