El gerente del hospital San Bernardo, Pablo Salomón, informó esta tarde que comenzarán a disminuir la cantidad de camas disponibles para pacientes con COVID-19 de manera paulatina hasta llegar a la mitad. La decisión fue pactada esta mañana con el ministro de Salud Pública, Juan José Esteban.
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El gerente del hospital San Bernardo, Pablo Salomón, informó esta tarde que comenzarán a disminuir la cantidad de camas disponibles para pacientes con COVID-19 de manera paulatina hasta llegar a la mitad. La decisión fue pactada esta mañana con el ministro de Salud Pública, Juan José Esteban.
"Hay una tendencia a la disminución de las consultas por COVID-19", aseguró el médico y mencionó que, al aumentar la circulación de las personas, empezó a haber más demanda de pacientes con politraumatismos y otras patologías que suelen atenderse en este nosocomio. "Estamos en el rebrote por el Día de la Madre y esperamos que después siga una tendencia en baja de los casos", señaló.
"Hoy, el sistema de salud está mucho más relajado y oxigenado", manifestó el gerente y expresó que se observa que los casos de coronavirus van en descenso: "En mi humilde opinión, el pico de casos COVID-19 ya pasó. No creo que se vuelva a vivir lo que se vivió a fines de agosto y todo septiembre". El médico consideró que podría haber un rebrote en la Argentina cuando llegue la época invernal, el año próximo: "Esperamos que no sea tan acentuado como en Europa".
Salomón recordó que el hospital San Bernardo, en principio, no atendería a pacientes infectados con SARS-CoV-2. Antes del brote, el nosocomio contaba con 12 camas de baja complejidad y 6 de alta complejidad para atender a este tipo de pacientes.
La explosión de casos de COVID-19 en Salta llevó a aumentar la capacidad a 170 camas de baja complejidad -incluidas las 50 que están en la carpa colindante- y a 20 de alta complejidad. "Se llegó a esos números cuando el sistema sanitario estuvo más estresado, trabajando casi al límite", mencionó el médico. Con el nuevo plan, se llegaría de a poco a la mitad de esta capacidad alcanzada.
Salomón confirmó que las 50 camas de la carpa "van a seguir seguro hasta principios del año que viene" y mencionó que este espacio, que se inauguró el 5 de octubre último, tuvo muy poca demanda "porque el sistema sanitario se oxigenó bastante después de un gran estrés".
Salomón evaluó que el descenso en los casos de COVID-19 se logró "gracias al aislamiento y la última cuarentena estricta". "El trabajo del Comité Operativo de Emergencia (COE) y el trabajo en equipo multidisciplinario de todo el sistema de salud dio sus frutos", pronunció.
Testeos serológicos
Estas semanas se van a realizar test serológicos a todo el personal del hospital San Bernardo, para saber si tienen anticuerpos frente al nuevo coronavirus. A quienes arrojen resultado negativo ante este estudio se les realizarán hisopados para testeos grupales por PCR.