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Vélez Sarsfield le dio una lección de fútbol colectivo a River Plate y le hizo precio al ganarle 2-0 en Liniers, para afirmarse entre los principales animadores del torneo Inicial.
El fortín, desde el comienzo, puso de manifiesto su superioridad, haciéndose rápidamente del control de la pelota y del dominio territorial, por lo que generó situaciones de gol consecutivas, comandadas por el jugador más desequilibrante: Lucas Pratto.
Luego de varios intentos el marcador se abrió a los 19 minutos. Bella buscó a Federico Insúa por la derecha, el zurdo metió un centro rasante y Pratto en dos tiempos capitalizó la acción y marcó el 1 a 0. Vélez dispuso como mínimo de dos situaciones netas para terminar la primera etapa con un reflejo más elocuente.
En el complemento todo siguió igual, más allá de que desde la reanudación Matías Almeyda puso a Facundo Affranchino en reemplazo de Abecasis, con la intención de equilibrar la lucha en la mitad del terreno.
El equipo de Gareca era más y lo tuvo en dos oportunidades. A los 16m fue expulado Ramiro Funes Mori y, mientras Almeyda decidía una variante para rearmar la retaguardia, sobre los 18m Vélez estiró con justicia la diferencia: desbordó Insúa por izquierda y Ferreyra metió el cabezazo que sacó Barovero al costado, pero Ferreyra tomó el rebote y puso otro centro para la cabeza de Bella, que tocó suave al gol.
El fortín frenó en su ímpetu porque Emiliano Papa vio la roja. Después se vio el episodio bochornoso de un grupo de barras y cuando el juego volvió a la normalidad hubo un cabezazo de Mora que pegó en el horizontal.
Con este triunfo a Vélez se lo ve en pleno crecimiento, mientras River solo es una suma de individualidades.