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Trabajadores del municipio de Aguaray tomaron ayer el canchón para impedir el acceso del personal y vehículos al edificio. Eligieron esa forma para protestar por la decisión adoptada por el intendente, Alfredo Darouiche, que decidió volver atrás con el pase a la planta permanente de 11 empleados, además de anunciar que quedarán fuera del plantel 34 contratados para volverlos a la condición de trabajadores eventuales. Esta última modalidad los deja en condición de ilegales y cobrarían en negro.
La decisión de Darouiche provocó el esperable malestar de toda la planta de trabajadores, que pidieron la inmediata intervención del gremio de ATE. "La propuesta del intendente y de su gabinete fue que cada empleado hiciera arreglos personales, hablando personalmente con cada uno de ellos. Pero la gente no aceptó la modalidad ni la propuesta ya que las negociaciones laborales y salariales deben hacerse a través de los representantes gremiales que, lamentablemente para estos funcionarios, soy yo", explicó Fermín Hoyos, secretario de la seccional San Martín de ATE.
El dirigente precisó que "los 11 trabajadores habían sido pasados a la planta permanente, pero hace dos días el intendente dio marcha atrás y pretendió hacerles firmar un contrato. Son empleados de mucha experiencia en lo administrativo, se negaron a firmar e inmediatamente me consultaron para que vaya a Aguaray a analizar la situación. Pero no terminó allí, ya que 35 contratados que había logrado esa condición en diciembre, fueron pasados a la planta de eventuales. El argumento de Darouiche es que estos trabajadores son simpatizantes del anterior intendente, pero eso es algo que al gremio le tiene totalmente sin cuidado. La gente puede simpatizar con quien quiera y eso no puede ser nunca motivo de despidos o persecución".
Hasta anoche, el edificio municipal permanecía prácticamente tomado, sin posibilidad de ingreso.
"Hasta tanto Darouiche revea su decisión, el municipio seguirá sin ninguna actividad", anticipó Hoyos.
La decisión de Darouiche provocó el esperable malestar de toda la planta de trabajadores, que pidieron la inmediata intervención del gremio de ATE. "La propuesta del intendente y de su gabinete fue que cada empleado hiciera arreglos personales, hablando personalmente con cada uno de ellos. Pero la gente no aceptó la modalidad ni la propuesta ya que las negociaciones laborales y salariales deben hacerse a través de los representantes gremiales que, lamentablemente para estos funcionarios, soy yo", explicó Fermín Hoyos, secretario de la seccional San Martín de ATE.
El dirigente precisó que "los 11 trabajadores habían sido pasados a la planta permanente, pero hace dos días el intendente dio marcha atrás y pretendió hacerles firmar un contrato. Son empleados de mucha experiencia en lo administrativo, se negaron a firmar e inmediatamente me consultaron para que vaya a Aguaray a analizar la situación. Pero no terminó allí, ya que 35 contratados que había logrado esa condición en diciembre, fueron pasados a la planta de eventuales. El argumento de Darouiche es que estos trabajadores son simpatizantes del anterior intendente, pero eso es algo que al gremio le tiene totalmente sin cuidado. La gente puede simpatizar con quien quiera y eso no puede ser nunca motivo de despidos o persecución".
Hasta anoche, el edificio municipal permanecía prácticamente tomado, sin posibilidad de ingreso.
"Hasta tanto Darouiche revea su decisión, el municipio seguirá sin ninguna actividad", anticipó Hoyos.
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