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El suelo en el centro de la escena

Se realizó una nueva edición del Congreso de Aapresid.
Sabado, 20 de agosto de 2022 18:01

La Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid) realizó la 30° edición de su congreso bajo el lema “Un congreso a suelo abierto”, que tuvo lugar el 10 al 12 de agosto en el Salón Metropolitano de Rosario, en el que se discutieron las tendencias e innovaciones que el campo viene liderando, con las empresas y productores como vehiculizadores de este proceso.

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La Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid) realizó la 30° edición de su congreso bajo el lema “Un congreso a suelo abierto”, que tuvo lugar el 10 al 12 de agosto en el Salón Metropolitano de Rosario, en el que se discutieron las tendencias e innovaciones que el campo viene liderando, con las empresas y productores como vehiculizadores de este proceso.

Del Congreso Aapresid participaron, sin números definitivos al cierre de esta edición, 5.000 personas, 95 expositores y empresas, y 300 expositores que disertaron en 9 salas.

“Un nuevo congreso nos convoca, el trigésimo en los 33 años de la institución, y decidimos bautizarlo A Suelo Abierto, parafraseando lo que ocurre en una operación quirúrgica a corazón abierto, aquí vamos a intentar recorrer el mismo camino”, dijo David Roggero, presidente de Aapresid en la apertura del evento y agregó: “Les proponemos adentrarnos en esa aventura de abrir algo muy delicado e indispensable para la vida con el fin de cuidarlo, jamás para dañarlo, siendo conscientes que sin él la vida es inviable”. 

Roggero apuntó que en el 2022 el camino indicado es el de la Siembra Directa (SD). “En cada situación cercana a la labranza se desencadenan una serie de procesos químicos, físicos y biológicos que a priori nos ofrecen algunas ventajas, pero como efecto añadido genera un sinnúmero de daños colaterales de gran magnitud, esa obra de arte que Dios, a través de la naturaleza, nos brinda y denominamos suelo en gran medida colapsa”, destacó y resaltó que “quizás puede parecer que continúa siendo lo mismo, pero la ciencia nos amplía la visión demostrándonos que ya no es lo mismo, los procesos de degradación de la materia orgánica se aceleran y rápida e innecesariamente luego de cada pequeña labranza y sin materia orgánica sólo tendremos un sustento físico carente de vida e incapaz de permitirnos subsistir como humanidad”. 

Para el presidente de Aapresid, a esta situación desafortunada se le suma que esa degradación desmedida se transforma en dióxido de carbono, elemento al que también deberíamos prestar atención si queremos que el planeta tierra siga con vida. “El dióxido de carbono es necesario para llevar a cabo la fotosíntesis, pero en cantidades excesivas se nos transforma en una barrera difícil de sobrellevar denominada capa de efecto invernadero. Los que estamos aquí tenemos que entender y poner manos a la obra en este camino de la producción sin labranza”, explicó.

De esta manera, Roggero destacó que “el no remover la tierra es el primer paso que nos permite adentrarnos en el sistema de Siembra Directa, pero con ellos no es suficiente para que logremos el camino deseado”. “Problemáticas asociadas a densificaciones, baja infiltración, estructura de costos y dificultad en el control de malezas pueden ser algunos de los argumentos esgrimidos, argumentos que fácilmente pueden ser rebatidos si a la no remoción le sumamos los demás conceptos que hacen a un sistema de SD como, por ejemplo, una rotación de cultivos y raíces vivas en cantidad y calidad a lo largo del año, rotaciones que necesariamente deberán ajustarse a las condiciones climáticas y al suelo de cada región a lo que, en Aapresid, le llamamos agricultura siempre verde”, dijo.

Roggero explicó que “esta agricultura siempre verde permite, entre otras cosas, alimentar a los millones de microorganismos que viven debajo de la superficie cumpliendo ese rol indelegable de poner los nutrientes a disposición de las plantas y junto al sol y al agua permiten llevar adelante la producción de alimentos para una humanidad creciente”. Además, destacó que “es imperioso devolver al suelo lo que nos llevamos en granos, carne, fibra”.

“Debemos lograr defendernos de las adversidades que nos ponen las plagas con una mirada sistémica a través del manejo integrado de plagas, un manejo que nos permitirá no sólo ajustar los costos económicos de nuestra producción sino también nos permitirá avanzar hacia ese cuidado de todo el ecosistema”, apuntó el presidente de Aapresid.

“La humanidad nos exige ser cada día más cuidadosos con el medio ambiente, estamos juntos con las empresas y la ciencia recorriendo ese camino”, comentó Roggero y dijo: “Durante el congreso tenemos la posibilidad de encontrar respuestas abonando a este concepto que subyace en Aapresid que dice nadie sabe tanto como lo que sabemos todos juntos”.

Importancia del suelo para la humanidad

La apertura del congreso congregó a un panel internacional que hizo eje en el suelo.

En el marco del Congreso de Aapresid 2022, Pilu Giraudo, presidenta honoraria de la entidad, presentó desde la virtualidad a un panel internacional de lujo integrado por Rattan Lal, científico de la Universidad Estatal de Ohio; Kelly Witkowski, gerente del Programa de Cambio Climático y Recursos Naturales del IICA; e Ibrahim Mayaki, de la iniciativa 4 por 1000.

Lal comenzó remarcando la necesidad de comprender que el suelo es un recurso finito, donde hay una marcada disminución de tierra en calidad, cantidad y distribución y por ende se encuentra en “peligro de extinción”. Y, en este sentido, afirmó que se debe promover la seguridad nutricional y alimentaria, combinarla con la necesidad de mejorar y proteger al medio ambiente teniendo en cuenta siempre la preservación y el cuidado del recurso suelo. 

Luego, aclaró que se debe aumentar la productividad agrícola a partir de la tierra existente, restaurando las tierras degradadas aumentando la fijación de nitrógeno biológico, para devolver tierra a la naturaleza.

“Un buen suelo preservado con buenos insumos lleva a un rendimiento bueno y a una buena calidad de vida para los agricultores”, remarcó Lal.

Por su parte, Witkoswki afirmó que la situación de este recurso finito es preocupante ya que hay estudios que confirman que el 25 % de los suelos en la tierra están degradados y aclaró que hay una necesidad clara de duplicar los esfuerzos para revertir esto, equilibrando metas a nivel local y global.

La gerente del Programa de Cambio Climático y Recursos Naturales del IICA recalcó que hay que saber tomar las decisiones proactivas necesarias a la hora de preservar el suelo, asegurarse que la salud de estos incluya los diferentes organismos nacionales e internacionales, políticas de todos los países involucrados en esto ya que “preservar el suelo es asunto de todos”.

Mayaki, en su alocución, relató que a la hora de preservar la tierra en sí debe haber un trabajo en conjunto integrado por profesionales, académicos y legisladores para poder abordar los desafíos juntos. A su vez relató la importancia de combinar la preservación de dicho recurso y mejorar mejores condiciones para el desarrollo de alimentos ya que esto se trata de “cuidar el suelo y asegurar seguridad alimentaria”.

“En el futuro se avanza hacia la tendencia de la agroecología, estamos avanzando mundialmente desde una agricultura convencional hacia la agricultura orgánica. Hay un manejo más holístico de la agricultura donde hay más sensibilización, concientización, mejores prácticas, compartiendo conocimientos y acompañando entre todos esta transición”, dijo Mayaki.

 

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