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Laura Muñoz, la joven mendocina que inició una demanda de divorcio contra su marido, Alejandro Vanderbroele, al que sindicó como “testaferro” de Amado Boudou, dijo que le “indigna” escuchar al vicepresidente defenderse de las acusaciones. “Las cosas que dice no son ciertas”, asegura.
“Ellos se están defendiendo con mentiras”, acotó la mujer y ratificó una vez más que Boudou y su marido “se conocen desde Mar del Plata”, tiempo antes de que el funcionario llegara al Gobierno, aunque ese vínculo fue negado por ambos.
Muñoz indicó: “Lo escucho al vicepresidente hablar y me indigna porque las cosas que dice, que no son ciertas”.
En su intento de despegarse del escándalo por el levantamiento de la quiebra de Ciccone y la posibilidad de que la firma inicie negocios con el Estado por la impresión de billetes, el vicepresidente había sido tajante: “No conozco a Vanderbroele”.
“Es toda una estrategia para defenderse”, remarcó la mujer en alusión a la negativa del vicepresidente y del directivo de la empresa ex-Ciccone Calcográfica sobre su amistad.
Al respecto, Muñoz dijo: “O son muy inteligentes para defenderse y nadie se da cuenta cuál es la estrategia o es muy pobre lo que están haciendo”. “No sé qué piensan”, acotó.
Muñoz advirtió además: “Sería muy ingenua en creer que van a decir: "Sí, Laura tiene razón'”, pero ratificó que el vicepresidente Amado Boudou “sí lo conoce” a su marido, Alejandro Vanderbroele.