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La huelga de hambre y el encadenamiento del vocal kolla, Miguel Siares, siguió en la puerta del Instituto Provincial de Pueblos Indígenas de Salta.
Junto a otras personas que se fueron sumando reclaman la falta de atención y solución para dos familias que deberá ser desalojadas, por orden judicial, en el paraje El Gólgota, de la quebrada del Río Toro.
Siares denunció “discriminación”, por parte del presidente del organismo, Enrique Arello, por considerar que solo “se ocupa del norte y de los demás no”.
Lo cierto es que Arello dialogó con El Tribuno y respondió los cuestionamientos del vocal opositor.
El titular dijo que no tenían conocimiento sobre la situación de las dos familias que serán desalojadas, pero porque Siares nunca llevó la información.
“La orden de desalojo dictada por la Justicia lleva un proceso largo de tiempo en el cual Siares debería haber cumplido con todos los pasos institucionales para dar a conocer un problema que afecta a dos familias a las cuales él representa”, dijo Arello.
“Sucede que recién lo hizo por una simple interna política que tiene conmigo. Evidentemente se aprovecha de la desgracia de dos familias y eso no es correcto”, completó.
“Nosotros venimos al Ippis a pedir asistencia jurídica porque Arello está discrimando a los pueblo kollas”, dijo desde la reja Siares.
Más allá de los fuegos cruzados, lo cierto es que el martes partió el titular del Ippis junto al abogado Joaquín Vélez rumbo a la quebrada del Toro a chequear la situación de las dos familias.