Uno de cada cinco adolescentes argentinos de entre 13 y 15 años fuma, y la mayoría de ellos comienza a consumir cigarrillos a partir de los 12, en tanto que una ONG denuncia que las tabacaleras intentan atraer menores al
consumo mediante la promoción de cigarrillos saborizados. Los datos y la petición, a través de un petitorio, son difundidos por la Fundación Interamericana del Corazón (FIC) Argentina. La entidad -en base a un estudio realizado por la John Hopkins Bloomberg School of Public Health, de Estados Unidos, realizado en Argentina y otros cinco países- alertó que las empresas tabacaleras implementan estrategias de captación de fumadores desde niño a través de cigarrillos saborizados. La FIC recuerda que "en nuestro país, la Ley Nacional número 26.687 prohibe la publicidad, promoción y patrocinio de productos de tabaco pero permite, con algunas restricciones, la publicidad en el interior de los kioscos. Por otro lado, cinco provincias han sancionado leyes más protectoras que establecen una prohibición completa de publicidad, sin excepciones. No obstante, ninguna de estas normativas prohíbe en forma explícita explícitamente la exhibición de productos de tabaco en los kioscos. El estudio impulsado por Johns Hopkins Bloomberg School of Public Health (JHSPH), en el marco del 5to. Congreso Latinoamericano y del Caribe Tabaco o Salud que se desarrolla en Uruguay, reflejó que en cinco ciudades de América Latina (Buenos Aires, La Paz, Río de Janeiro, Santiago de Chile y Lima) la industria tabacalera despliega una "estrategia de comercialización de productos en los puntos de venta para atraer a los niños y niñas y promover su iniciación en el tabaquismo". En el estudio se relevaron 825 puntos de venta en las cinco ciudades que estaban ubicadas a menos de 250 metros de escuelas primarias y secundarias. El 85,2% (703) vendían cigarrillos con mentol u otros descriptores de sabor y el 71,4 (589) vendían cigarrillos con cápsulas de sabor. El informe destaca además que un 92,3% de los puntos de venta observados que vendían cigarrillos saborizados, tenían estos productos dispuestos en exhibidores y un 34,3% tenían anuncios publicitarios. Marita Pizarro, codirectora ejecutiva de FIC Argentina, sostuvo que "el relevamiento nos confirma que la estrategia de exhibición de productos de tabaco en los kioscos es una táctica global de las tabacaleras para atraer a los chicos al
consumo". "En Argentina, donde tenemos una restricción parcial de la publicidad, promoción y patrocinio de los productos de tabaco, la industria se vuelca hacia la exhibición de cigarrillos, especialmente de los saborizados, para que parezcan inofensivos y se naturalice su consumo", indicó Pizarro.
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Uno de cada cinco adolescentes argentinos de entre 13 y 15 años fuma, y la mayoría de ellos comienza a consumir cigarrillos a partir de los 12, en tanto que una ONG denuncia que las tabacaleras intentan atraer menores al
consumo mediante la promoción de cigarrillos saborizados. Los datos y la petición, a través de un petitorio, son difundidos por la Fundación Interamericana del Corazón (FIC) Argentina. La entidad -en base a un estudio realizado por la John Hopkins Bloomberg School of Public Health, de Estados Unidos, realizado en Argentina y otros cinco países- alertó que las empresas tabacaleras implementan estrategias de captación de fumadores desde niño a través de cigarrillos saborizados. La FIC recuerda que "en nuestro país, la Ley Nacional número 26.687 prohibe la publicidad, promoción y patrocinio de productos de tabaco pero permite, con algunas restricciones, la publicidad en el interior de los kioscos. Por otro lado, cinco provincias han sancionado leyes más protectoras que establecen una prohibición completa de publicidad, sin excepciones. No obstante, ninguna de estas normativas prohíbe en forma explícita explícitamente la exhibición de productos de tabaco en los kioscos. El estudio impulsado por Johns Hopkins Bloomberg School of Public Health (JHSPH), en el marco del 5to. Congreso Latinoamericano y del Caribe Tabaco o Salud que se desarrolla en Uruguay, reflejó que en cinco ciudades de América Latina (Buenos Aires, La Paz, Río de Janeiro, Santiago de Chile y Lima) la industria tabacalera despliega una "estrategia de comercialización de productos en los puntos de venta para atraer a los niños y niñas y promover su iniciación en el tabaquismo". En el estudio se relevaron 825 puntos de venta en las cinco ciudades que estaban ubicadas a menos de 250 metros de escuelas primarias y secundarias. El 85,2% (703) vendían cigarrillos con mentol u otros descriptores de sabor y el 71,4 (589) vendían cigarrillos con cápsulas de sabor. El informe destaca además que un 92,3% de los puntos de venta observados que vendían cigarrillos saborizados, tenían estos productos dispuestos en exhibidores y un 34,3% tenían anuncios publicitarios. Marita Pizarro, codirectora ejecutiva de FIC Argentina, sostuvo que "el relevamiento nos confirma que la estrategia de exhibición de productos de tabaco en los kioscos es una táctica global de las tabacaleras para atraer a los chicos al
consumo". "En Argentina, donde tenemos una restricción parcial de la publicidad, promoción y patrocinio de los productos de tabaco, la industria se vuelca hacia la exhibición de cigarrillos, especialmente de los saborizados, para que parezcan inofensivos y se naturalice su consumo", indicó Pizarro.