¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

Su sesión ha expirado

Iniciar sesión
16°
5 de Julio,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Apoyan a la escuela en la que golpearon al niño salteño

Sabado, 09 de junio de 2012 12:59
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Los padres y vecinos de Fighiera acusan a los medios de comunicación porque los consideran como monstruos.

Sigue la polémica en la localidad santafesina de Fighiera, donde a un estudiante oranense de 11 años tuvieron que extirparle un testículo después de una agresión de sus compañeros, que lo discriminaban por ser de Salta, según manifestaron sus familiares. El Tribuno informó que la madre había denunciado esta discriminación frente al Ministerio de Educación local en octubre pasado y que el chico no seguirá estudiando en la única escuela primaria del lugar después de lo que pasó. Ahora, un grupo de padres de la institución convocó a un “abrazo solidario por la verdad”, para dar su “apoyo incondicional a la escuela y para defender el buen nombre del pueblo”.
 

Miriam Domínguez, la madre salteña de 45 años, le dijo a este medio que con su familia se ausentarán del pueblo mientras dure la marcha, por temor a alguna represalia, pero, sobre todo, para cuidar la preciada tranquilidad de su hijo. “Nos tenemos que ir, porque mi hijo está en tratamiento psicológico y no quiero que se sienta mal. Me siento culpable, porque si no hubiese denunciado mi hijo se habría recuperado tranquilo de su operación. No gano nada con mentir. Yo no busco nada. La plata no me va a hacer más o menos gente. Yo he ido a defender a mi hijo. Eran solo algunos chicos los que lo hostigaban, no todos lo molestaban o discriminaban por ser salteño”, dijo Miriam.
En los últimos cinco meses no hubo una sola denuncia en la comisaría de Fighiera, según contó el presidente de la comuna, Carlos Mariani, que se comprometió a resguardar la seguridad de toda la familia salteña y aseguró que no es una marcha contra ella. “Es una marcha convocada por padres que de manera pacífica quieren que se escuche la verdad de la escuela. La familia salteña no va a sufrir ningún tipo de agresión”, dijo.
Una maestra, que no quiso dar su nombre y que aseguró no poder hablar libremente porque en la causa penal rige el secreto de sumario, le dijo a El Tribuno llorando: “No es una marcha contra ella y su familia, por favor, que se entienda. Es una marcha que organizaron algunos padres para apoyar a la escuela porque es muy injusto el momento que estamos pasando todos en el pueblo. Tenemos una angustia y un dolor indescriptibles por ver a medios nacionales tratándonos de monstruos, prácticamente. El abrazo busca también decirles a todos los salteños que en este pueblo siempre son y serán bienvenidos‘.
 

No niegan la agresión

La escuela no tiene antecedentes de actos de violencia por discriminación anteriores a este caso. La versión de las autoridades escolares, según pudo reconstruir El Tribuno, indica que no existió abandono de los docentes, que cuando les informaron de la supuesta agresión actuaron de inmediato. No niegan la existencia de la agresión, pero aseguran que ningún alumno o maestra recuerda que le haya pasado algo al salteño dos días antes de ser operado de urgencia.
Fuentes escolares revelaron que para las maestras el chico tenía una atención diferenciada; “estaba en una cajita de cristal”, dijeron.
 

Discriminación

Hace unas semanas, el caso del pequeño oranense a quien sus compañeros le dieron una paliza por ser salteño conmovió a medios de todo el país. Como consecuencia de la brutalidad con que fue atacado, el chico -de 11 años- perdió uno de sus testículos.
 

El hecho ocurrió el 16 de mayo, cuando el chico recibió una patada en la entrepierna que lo dejó arrodillado, sin aire. A pesar de eso volvió a clases, porque ya muchas veces le habían pegado y muchas veces había denunciado el maltrato a sus maestras. Al día siguiente le tuvieron que extirpar un testículo.
 

En una nota con El Tribuno la madre ya había denunciado que desde la escuela solo habia recibido hostigamientos por dar a conocer el hecho: “Las autoridades escolares se están portando muy mal. Están en contra nuestro y dicen que todo es mentira y que nadie golpeó a mi hijo”, contaba en aquel momento Miriam.

Los organizadores no quiren hablar

El Tribuno intentó hablar con tres de las madres, que según fuentes escolares, organizaban el abrazo solidario. Ninguna quiso hablar con este medio.
“Si querés saber de qué se trata podes ir a la marcha”, dijo una madre que vive sobre la calle San Martín.
“Estoy con el plomero y tengo que buscar a la nena de la escuela. Después tengo un cumpleaños y tampoco puedo”, se escudó otra sobre la calle Ameghino, a una cuadra de la plaza central del pueblo.
“Soy salteño y vivo aquí desde los cuatro años. Fui de chico a esta escuela y mi hija está en cuarto grado. Tengo que decir que nunca me discriminaron. Si pasó eso es lamentable, pero no se puede ensuciar a todo el pueblo”, dijo el metanense Sergio Yllanes, de 50 años.
 

Por su parte los familiares le dicen Miriam Domínguez que pare un poco de llorar. “No seas maricona”, la retan en broma a Miriam su madre y su hermana.
“A fin de año lo operaron de los pies y le hicieron todos los estudios. No tenía un problema congénito, su historia clínica es perfecta. No fue casualidad lo que le pasó. El médico me dijo que tenía sangre coagulada como la que se forma después de un golpe. Si tenía morado, quiere decir que al chico lo han golpeado y que fue adentro de la escuela. Si algún padre sabe algo no se lo calle más, para que no vuelva a pasara”, pi dió la madre salteña.
 

Temas de la nota

PUBLICIDAD
PUBLICIDAD